Entre los objetivos a mediano plazo del proyecto está la creación de un banco de semillas comunitario en la Región de Coquimbo, que permita a las comunidades producir, almacenar y distribuir semillas, asegurando alimentos sanos y contribuyendo a la soberanía alimentaria del país
Más de 100 agricultores, con énfasis en la provincia del Limarí, están participando en un inédito proceso de recuperación de semillas tradicionales de maíz y porotos, obtenidas a partir de germoplasma conservado por más de 30 años en el Banco Base de Semillas del INIA Intihuasi, ubicado en Vicuña. Esta iniciativa forma parte del proyecto “Cultivos tradicionales de Chile: fuente de alimentos nutritivos para la seguridad y soberanía alimentaria del país”, liderado por el Instituto de Investigaciones Agropecuarias (INIA) con apoyo del Ministerio de Ciencia, Tecnología, Conocimiento e Innovación.
Carolina Pañitrur, coordinadora técnica de soberanía alimentaria de INIA, destacó que el proyecto no solo busca entregar semillas a los agricultores, sino también capacitarlos en su multiplicación para que puedan compartirlas y fortalecer la agricultura local. Por su parte, Iris Lobos, directora nacional de INIA, subrayó que este trabajo permite llevar tecnologías validadas directamente a las comunidades, acelerando su implementación.
El programa incluye talleres teóricos y prácticos, visitas de investigadores de INIA a terrenos agrícolas, y jornadas de puertas abiertas en el Banco Base de Semillas, lo que ha permitido conectar a los agricultores con el trabajo de conservación de germoplasma.
Mirtha Gallardo, presidenta de la Asociación Gremial de Comunidades Agrícolas del Limarí, destacó la importancia de esta colaboración: “Hoy se materializan propuestas que impulsamos hace años. Es emocionante ver a campesinos y agricultores participando activamente en el resguardo y réplica de este patrimonio, contribuyendo a una mejor alimentación, al cambio climático y al fortalecimiento de la vida rural”.
Además, el seremi de Agricultura, Cristian Álvarez, valoró esta iniciativa como un ejemplo clave de la política de seguridad alimentaria impulsada por el presidente Gabriel Boric, en conjunto con el apoyo de INDAP.
Entre los objetivos a mediano plazo del proyecto está la creación de un banco de semillas comunitario en la Región de Coquimbo, que permita a las comunidades producir, almacenar y distribuir semillas, asegurando alimentos sanos y contribuyendo a la soberanía alimentaria del país.