InicioActualidadCrónicaReiki: Una puerta a la sanación espiritual y el crecimiento personal

Reiki: Una puerta a la sanación espiritual y el crecimiento personal

La agrupación Reiki Ovalle, recientemente conformada, busca difundir esta práctica milenaria como herramienta de autoconocimiento y conexión con la energía universal, beneficiando no solo a los ovallinos sino también a comunidades vecinas e incluso internacionales.

Originado en Japón a principios del siglo XX, el Reiki es una terapia que canaliza energía vital para promover equilibrio físico, emocional y espiritual. Hoy, en Ovalle, una agrupación local trabaja para llevar sus principios a la comunidad, guiada por la filosofía de que todos somos parte de una inteligencia universal.

El Reiki, una práctica terapéutica con raíces en Japón, fue desarrollado por Mikao Usui como un camino para armonizar la energía vital a través de las manos. Su filosofía se basa en la idea de que existe una presencia inteligente y universal que permea todo lo creado: desde los seres humanos hasta el mundo microscópico. «Reiki, en japonés, se refiere a esa energía que está manifiesta en todo lo que existe», explica Hernán Latorre, mentor de la Agrupación Reiki Ovalle. «Somos parte activa de este universo, y esta práctica nos permite enriquecer nuestra comprensión de lo que realmente somos: no solo cuerpo y mente, sino vida en su expresión más pura».

Recientemente, la agrupación logró su formalización, consolidándose como una entidad de propósito social. Su misión es clara: difundir el Reiki como herramienta de crecimiento personal y espiritual, trascendiendo las fronteras de Ovalle. «Ya estamos trabajando en Serena, Tongoy, Santiago e incluso Argentina», destaca Latorre. Para él, esta disciplina no es solo una técnica, sino una filosofía de vida que invita a reconectarse con la esencia misma de la existencia.

Francisco Correa, presidente de la agrupación, enfatiza que el objetivo central es el desarrollo personal de sus integrantes y ser un aporte para la comunidad. «Todo partió hace años, cuando nuestros maestros comenzaron a explorar el aspecto espiritual del Reiki y otras filosofías afines», relata. Hoy, el grupo cuenta con entre 25 y 30 asociados, pero sus encuentros ya reúnen a cerca de 45 personas. «Somos una agrupación abierta. No exigimos membresías; quien quiera puede venir y participar», aclara Correa.

Aunque aún no tienen un espacio físico fijo, su labor se sostiene mediante conexiones digitales y el boca a boca. «Estamos creciendo poco a poco, y pronto esperamos lanzar un boletín mensual para mantener informada a la comunidad», adelanta el presidente. La visión es clara: ser un puente entre las personas y la energía universal, sin distinciones. «Estamos abiertos a todas las filosofías. Lo importante es el crecimiento personal y colectivo», concluye Correa.

Con esta iniciativa, Reiki Ovalle se posiciona no solo como una alternativa de sanación, sino como un movimiento que invita a redescubrir la interconexión entre el ser humano y el cosmos.

OvalleHoy.cl