La Policía de Investigaciones trabaja para dar con los responsables que hicieron creer a los padres de dos niños que estaban secuestrados junto a la asesora de hogar. En total hubo una pérdida de $750.000 que fueron depositados a una cuenta Rut.
En la tarde de ayer, miércoles 15 de marzo, se generó gran preocupación y se encendieron todas las alarmas en la ciudad por un supuesto caso de secuestro de dos menores de edad, quienes habrían sido raptados desde su domicilio ubicado en el sector de El Portal, hasta donde llegó un fuerte contingente policial para hacerse cargo de la investigación. Afortunadamente cerca de las 21 horas fueron hallados los dos niños que habrían sufrido el plagio.
Según la Policía de Investigaciones, los hechos ocurrieron a las 16:00 horas, cuando la asesora del hogar recibe un llamado de desconocidos señalando que los dueños de casa habrían sufrido un accidente, por lo que debía depositar la cantidad de $500.000. Al ir a depositar el dinero, la mujer deja en la vivienda a dos menores, de 6 y 13 años de edad, que estaban bajo su custodia, quienes en su ausencia reciben otro llamado telefónico de los sujetos que les señalan que debían ir hasta el mall para encontrarse con su mamá.
“Los menores hacen caso a las peticiones de los supuestos secuestradores y en el intertanto se contactan con los padres, a quienes les señalan que sus hijos y nana fueron secuestrados por lo que deben depositar la suma de $250.000 a una cuenta RUT, dado que sus familiares no aparecían, cursaron la denuncia en la policía”, indicó el Comisario Raúl Muñoz de la Brigada de Investigación Criminal de Ovalle.
En tanto, el Fiscal de turno, Freddy Salinas confirmó que se trató de una estafa telefónica y no un secuestro como se dijo en un comienzo y explicó que «lo que llamó a engaño fue el desorden que dejó la asesora del hogar cuando, antes de salir de la casa, buscó el dinero para satisfacer las demandas de los delincuentes».
Al mismo tiempo, Salinas reconoció que «los delincuentes fueron muy hábiles para, a través de las comunicaciones telefónicas, mantener separados a los padres, a la nana y a los mismos niños para evitar que se comunicaran entre ellos».
En este sentido, el comisario Muñoz comentó que «estamos en presencia de un modelo de estafas telefónicas que simula ser un secuestro con ribetes sofisticados que elaboraron los imputados, para poder engañar a los niños, la asesora del hogar y los padres al mismo tiempo”.
Afortunadamente, alrededor de las 21:00 horas se logró dar con el paradero de los niños, quienes se encuentran en buen estado de salud y se estableció que la familia fue víctima del «cuento del tío», por lo que se trabaja intensamente para dar con los autores de los hechos y se analizan los tráficos de llamados.
Muñoz agregó además “que los menores y la asesora de ahogar jamás tuvieron contacto físico con los supuestos secuestradores, siempre fueron comunicados vía telefónica e incluso hacían grabar a los menores ciertas palabras, las que luego eran entregadas a los padres vía telefónica”.
Por último, el Fiscal de turno Freddy Salinas aseveró que los niños no sufrieron daño ni fueron amenazados, y que fueron derivados a su hogar, luego que los Detectives tomaran las declaraciones respectivas.
En total fue una suma de $750.000 la que se les depositó a los estafadores. Los investigadores policiales continúan con las diligencias para dar con la banda criminal, autores del ilícito, al mismo tiempo que la PDI pidió a la ciudadanía tener el resguardo ante este tipo de llamados y tomar siempre contacto con sus familiares directos antes de realizar algún depósito.