Después de la frase para el “bronce” del candidato oficialista de “les meteremos la mano en el bolsillo a quienes concentran el ingreso, para que ayuden a hacer patria alguna vez”, fuera de ser casi idéntica a la que esgrima el Sr. Maduro en Venezuela “le vamos a meter la mano en el bolsillo a los millonarios” uno pensaría que ya más desaciertos no debiese cometer; pero al parecer esto es sólo el inicio de un triste final; porque terminó ese día su discurso en la ciudad de Concepción con la frase, “hasta la victoria, siempre” que es la frase que acuñaba Ernesto Guevara y en vez de buscar unir a los chilenos, dejar un pasado odioso atrás y construir un futuro de consensos y dejar de lado lo que le hace mal a la sociedad, sigue buscando puntos que nos distancie y que no haga que Chile persista en un pasado que no le trae ningún bien a sus habitantes.
De hecho, volviendo a la frase para el “bronce” que se mandó el Sr. Guillier, al decirlas en pleno acto de campaña no hacen más que revestir de mayor gravedad sus dichos; puesto que los únicos que “meten la mano” en el bolsillo ajeno, son los delincuentes y no las personas decentes que trabajan día a día para llevar el sustento a sus hogares; es por ello que déjeme decirle Sr. Guillier, que sus palabras no sólo son agresivas e injustas sino que los únicos que generan bienestar económico y oportunidades son los privados desde el mundo empresarial, ya que todo lo que hace el Estado es financiado con recursos y dineros de los privados a través de los impuestos que pagamos. Por ello, decir que los empresarios no hacen patria, es una falsedad del porte de un buque y más. Por eso compatriotas no dejemos nos metan el dedo en la boca, no nos dejemos engañar, ya hemos sufrido cuatro años con un pésimo Gobierno, por no decir de un Gobierno mediocre, que produjo cambios que en nada beneficiaron a la población a largo plazo; sino muy por el contrario, lo único que trajo fue más problemas en especial a la clase media.
Digo esto, porque por ejemplo; la “famosa” reforma educacional, les quitó a los padres el derecho a elegir dónde educar a sus hijos; la reforma tributaria produjo un estancamiento profundo en el crecimiento económico y la reforma laboral ayudó a destruir empleos de forma importante, es por ello si queremos más de los mismo y peor sigamos en la senda del candidato oficialista o si queremos recuperar la senda del desarrollo e inversión, de ser nosotros los que escojamos a que establecimiento educacional quiero mandar a mis hijos o nietos y no una tómbola debemos votar por Piñera.
Esto no se trata de una defensa al mundo empresarial, sino de ser justos, pues como en todo orden de cosas, hay buenos y malos empresarios; buenos y malos abogados, médicos, profesores, trabajadores, jefes, funcionarios públicos, etc., etc. Esto se trata más bien de reconocer el aporte que hacen los buenos empresarios que son los que generan la mayor parte de los empleos en nuestro país, los que invierten arriesgándose y confiando en que puede salir bien, son los que le dan el dinamismo a nuestra economía, son los que generan bienestar económico y oportunidades.
No estoy minimizando el rol del Estado, ya que creo profundamente en el principio de subsidiariedad, donde el sector público hace todo lo que los privados no queramos o no podamos hacer. Esto es algo que el Gobierno de la Nueva Mayoría nunca ha entendido así, ya que restringe libertades como la de elegir dónde educar a nuestros hijos o crea instituciones de educación superior cuando en Chile ya existen casi 60 universidades y 43 institutos profesionales.
En fin, creo que el proyecto de sociedad de la Nueva Mayoría es un verdadero retroceso para el bienestar de las personas, porque cada cosa que proponen es una restricción adicional a las libertades o un fortalecimiento del rol del Estado donde no se necesita. Con eso se justifica la idea de “meter la mano en el bolsillo de los que concentran el ingreso”, creyendo que es un bolsillo de payaso de donde se pueden sacarse cosas sin fin.
Debieran tener la inteligencia y mirada de futuro de uno de los mejores Presidentes de la historia Abraham Lincoln que dijo “No puedes otorgar la fuerza al débil debilitando al fuerte; no puedes ayudar al pobre arruinando al rico”
Susana Verdugo Baraona.