- Demandados por ex secretaria de colegio particular fijaron posiciones.
- Entre los citados, se encontraba el ex director del establecimiento y jefe directo de la demandante, quien se negó a dar entrevistas y se opuso a que nuestro medio pudiera estar presente en la audiencia.
Una audiencia en la demanda por daño moral que presentó la ex secretaria del Colegio Amalia Errázuriz, Paola Andrea Enrique Pizarro, en contra del ex director Patricio Heriberto Gallardo Rivera y su ex colegio se llevó a cabo el pasado jueves 06 de diciembre a las 11 de la mañana en el Segundo Juzgado de Ovalle por orden de la Corte de Apelaciones de La Serena para el caso que se ventila en el tribunal de alzada de la capital regional.
Nuestro medio asistió al tribunal de Ovalle ubicado en calle Antonio Tirado; donde se realizaría la audiencia y se encontraban en el hall cinco personas: el ex director del CAE Patricio Gallardo, su abogado Hugo Tramujo; el representante de la Corporación Juan Subercaseaux, abogado José Luis Contreras y don Omar Vargas Paez abogado de la demandante además del señor receptor judicial don Claudio Dalidet Belmar.
A los pocos minutos, un funcionario judicial los hizo pasar a una sala y antes de empezar, nuestro medio solicitó permiso para poder estar presente en la audiencia pública, a lo que el ex director y su defensor, se opusieron. Tampoco accedieron a dar una entrevista o conversar luego de la audiencia.
Resultados
A través de la página web del poder judicial, OvalleHOY tuvo acceso al acta de la audiencia donde el demandado Patricio Gallardo Rivera debió responder consultas acerca de los hechos que originan la demanda – que en declaraciones al diario El Ovallino, el representante de la ex trabajadora explicó que es una acción de indemnización por daño moral a raíz de las serias y graves vulneraciones que sufrió ella por acoso y bullying laboral”, hechos que en palabras del abogado “están probados” y que la demandante “ha tenido una enfermedad larguísima”.
El principal protagonista fue precisamente el ex director Patricio Gallardo, que entre otras consultas debió responder sobre la relación laboral mantenida con la demandante.
El director al ser consultado contestó que la demandante “era secretaria del colegio, no personal porque nnunca tuvo una secretaria personal”, respondió.
Además, aclaró que tuvo conocimiento que ya había habido una causa RIT T1- 2014 del Primer Juzgado de Ovalle, en que “Paola Henriquez demandó por primera vez a la Corporación, persiguiendo el pago de sus demandas a lo que Gallardo señaló que “fui informado al iniciarse ese proceso laboral contra el colegio” y que “no hubo otro tipo de información de la situación. Y cuando hubo esta segunda demanda nuevamente” (de nuevo contra el colegio y contra su persona) precisó que “hubo reunión de directorio y se le informó esta situación. Me refiero al Directorio de la Corporación Juan Subercaseaux, que era mi empleador”
El ex jefe de la demandante fue consultado también acerca de la valorización del daño moral perseguido por la suma de 20 millones de pesos. Tras un momento de confusión, señaló que “creo que hay una confusión, ya que entendí que era la segunda demanda pero es efectivo entonces que la primera era por el monto que se me señala”.
Además señaló que fue “informado indirectamente” del avenimiento judicial con el colegio incluyó el pago de $13.200.000 pesos por la corporación”.
En torno a si sabía que la causa anterior del 1er juzgado de Ovalle fue terminada por haber avemiento judicial que incluyó la cláusula de total finiquito, pero solo y exclusivamente para la corporación y no para él; Patricio Gallardo Rivera señaló que tuvo conocimiento de aquello por la propia sostenedora “a través de la exhibición del documento al directorio de la Corporación en reunión citada para ese efecto tuvo conocimiento efectivo de aquello”, remarcó.
También fue consultado acerca de si durante los 21 años de trabajo de Paola Henríquez en la institución tuvo alguna denuncia por acoso laboral, a lo que el ex director del CAE señaló que “fue la única situación real y concreta que ocurrió” y añadió que “me extrañó mucho, ya que manteníamos una relación muy cordial y de respeto mutuo. Incluso, de cercanía por su situación personal y porque la conocí desde que salió del colegio y comenzó a trabajar con nosotros” y aclaró que “cuando digo real y concreta, me refiero a la denuncia”.
Respecto de si era efectivo y le constaba que jamás puso en conocimiento de su empleador las denuncias por los hechos de qué se le acusaba, Gallardo señaló que “porque nunca existieron, por lo tanto mal podría informar sobre algo inexistente. Era parte de mi responsabilidad informar al directorio de la Corporación en las reuniones mensuales de todo el acontecer, tanto administrativo como pedagógico. Y así se hizo siempre”, dijo.
Aclaró que “no podía informar yo a la Corporación sobre una denuncia que desconocía y de la cual sólo me enteré en reunión de directorio de la Corporación Juan Subercaseaux”.
Respecto a que nunca dio avisó al Sindicato de trabajadores del CAE de la denuncia de acoso laboral que hizo la demandante Paola Andrea Enrique Pizarro, Patricio Gallardo Rivera respondió que “cuando tuve conocimiento de las denuncias, me reuní con el directorio del Sindicato para conversar sobre el tema y preguntar si ellos habían tenido alguna denuncia al respecto quienes me señalaron su extrañeza y que nunca habían tenido ningún conocimiento de ello” y aclaró que “me reunía permanentemente con el directorio del sindicato, teníamos una muy buena relación de trabajo”.
Cabe señalar que la causa se encuentra pendiente en la Corte de La Serena quien deberá resolver este debate en segunda instancia.
Por Equipo OvalleHOY.cl

