Hace unas semanas el mundo científico confirmó la llegada de El Niño, que en esta oportunidad se presenta como un evento débil y de corta duración que podría traer más lluvias de lo normal, principalmente entre las regiones de Valparaíso y Maule.
Un escenario que fue analizado en detalle por el Gobierno y centros científicos de la Región de Coquimbo con el fin de conocer los pronósticos locales y anticipar medidas preventivas frente a mayores precipitaciones.
En la reunión se abordó el escenario en profundidad a través de presentaciones de distintos servicios del agro, además de la Dirección de Obras Hidráulicas del MOP y el Centro de Estudios Avanzados de Zonas Áridas (CEAZA).
Los pronósticos climatológicos estuvieron a cargo del CEAZA, cuyo Gerente Corporativo, Claudio Vásquez, explicó que “los índices marcan que debiese ser un Niño debilitado, donde se debiesen esperar precipitaciones, por lo que hay un llamado a estar atentos y coordinados, como es justamente el objetivo de esta reunión, tanto en materia de prevención como algunas medidas de emergencia que pudieran ocurrir en el año”.
Advierte que se trata de un pronóstico estacional y que no se puede adelantar aún la magnitud de la ocurrencia de estas lluvias, pero que, al existir opciones de que se produzcan, se debe estar atentos.
Otra advertencia que hicieron los expertos del Ceaza es que este pronóstico puede implicar la ocurrencia de lluvias tempranas, en sectores cordilleranos, lo que podría generar aluviones en zonas interiores con la bajada de quebradas.
Vasquez indicó que la idea de dar conocer esta información no es generar alarma “sino un llamado a la prevención, a la preocupación y a estar con las acciones de planificación adecuadas, adelantó que para la primera quincena de marzo no se avizora la ocurrencia de lluvias, aunque es necesario estar alertas para la segunda quincena.
Sobre esta instancia, la Intendenta Lucía Pinto afirmó que “la importancia de esta reunión es estar preparados, conocer cuáles son los potenciales escenarios a los que nos vamos a enfrentar durante este año debido a las posibles lluvias por la presencia de El Niño, y poder tomar los resguardos necesarios. Por ejemplo, hay medidas preventivas que podemos tomar en la agricultura, para evitar situaciones como las que vimos el año pasado y prevenir a los agricultores a que se preparen para posibles heladas; además de los posibles riesgos de quienes viven en zonas que pudiesen presentar algún riesgo debido a lluvias intensas”.
Desde el Ministerio de Agricultura, el Seremi (s), Eduardo Rodríguez, a su vez puntualizó que “los pronósticos señalan que podríamos tener precipitaciones de hasta 400 milímetros, pero en un escenario de cambio climático como el que estamos viviendo es muy difícil pronosticar cómo van a ocurrir las precipitaciones y por eso el llamado a los agricultores es siempre a la prevención, a mantener la infraestructura en buenas condiciones, tratar en lo posible de tomar y mantener seguros agrícolas que nos permitan pasar esta temporada invernal de la mejor forma posible”.