Todos los días transitamos por la avenida La Chimba en dirección al trabajo en el centro de la ciudad y lo hacemos atentos a lo que vemos alrededor y/o a los reclamos de los vecinos del sector.
En los últimos días hemos hecho mención a dos situaciones preocupantes: una la destrucción de un lomo de toro en la esquina con Pedro Barrios y la instalación en el lugar de otro más ancho, aunque de menor altura. Los vecinos nos hicieron notar que este más que un “lomo de toro” o un reductor de velocidad para los vehículos, servía para evitar que las aguas durante las lluvias muy copiosas ingresen a Pedro Barrios inundando las casas.
Ellos temían que este nuevo resalto más bajo, añadido a la construcción de un resalto similar a cuarenta metros aguas debajo de la avenida La Chimba, sería insuficiente para contener el agua.
Sin embargo, la noticia buena, es que en los últimos días sobre el nuevo resalto fue añadido un suplemento que sí estaría cumpliendo con las inquietudes de los residentes en cuanto a la altura. Bien, por quien corresponda la iniciativa.
¿Lo malo? Es que el mismo día que vimos eso, pudimos observar un gran camión tolva en el sitio eriazo de la avenida La Chimba, a un costado del Cendyr. Al parecer ingresó para dejar una carga de desechos de construcción.
Ya hicimos ver unos días antes cuando vimos a otro camión en el mismo lugar: si continúan ingresando vehículos de gran tamaño y peso, terminarán destruyendo la atractiva acera que fue instalada recientemente como una obra suplementaria al nuevo Estadio. Y la inversión será dilapidada.
En este caso sugerimos que (ya que los propietarios del terreno no muestran ningún interés en hacerlo) el Municipio levante una malla o un murito de poca altura para evitar que esto se repita y la acera sea sólo un bonito recuerdo.
M.B.I


