Aprobación de Bachelet continúa a la baja y alcanza nuevo récord, convirtiéndose este en un mínimo histórico en Adimark; si bien es cierto esta variación no es estadísticamente significativa, no es menos cierto que es el peor registro de la Presidenta en términos numéricos, pues su rechazo alcanza un 72% y su aprobación tan sólo un 22%, contrastando de sobremanera con los índices de su primer Gobierno, pues en este el nivel más bajo de aprobación fue tan sólo de un 35% en septiembre del 2007 e inclusive es más bajo que el período más crítico del ex Presidente Sebastián Piñera que llegó a tener un 26% de respaldo y un 66% de rechazo en Abril del 2012.
Ante semejante panorama me gustaría recordar las palabras emitidas por el diputado Osvaldo Andrade el 5 de julio del 2011, cuando por el entonces Presidente Piñera obtuvo un 53% de rechazo y un 35% de respaldo en la encuesta Cerc, Andrade dijo: “Chile no merece un Presidente con este nivel de desaprobación” y ahora que la aprobación es menor y el rechazo mayor se está en silencio. La verdad que este doble estándar de ver la paja en el ojo ajeno y no el tronco en el ojo de uno, es lo que nos lleva a no progresar y a empobrecernos como personas. En dicha oportunidad es señor Andrade le hizo un llamado al Gobierno y a la Alianza por Chile, a que se hicieran cargo de ese problema, diciendo que Chile no merecía un Gobierno que sistemáticamente, en todas las mediciones, sigue bajando en aquellos aspectos que son centrales para cualquier República, como son la credibilidad y la confianza en el Presidente, pues bien, ahora yo le digo al diputado Andrade hágase cargo de sus dichos.
No escondamos la mano después de lanzar la piedra, si en aquella oportunidad señaló que los que tenían la tarea de resolver las cosas no estaban haciendo su pega, ahora debiese tomar cartas en el asunto y no ser una vez más el candidato perfecto para el refrán de por la boca muere el pez. Puesto como dijo en aquella oportunidad que la mayoría de los chilenos no le creían al Presidente Piñera y eso era extraordinariamente desafortunado para el sistema político y no sólo para el Gobierno. Siendo el escenario actual mucho peor que el que existía a la hora de emitir semejante juicio. Por lo tanto como dijo Dalai Lama “ debiésemos seguir las tres R, Respeto a uno mismo, Respeto para con los otros, y Responsabilidad sobre todas nuestras acciones”.
Susana Verdugo Baraona.