Se dice de él, que es uno de los intelectuales latinoamericanos más sobresaliente del siglo XIX, llegando a escribir alrededor de 52 libros, donde su obra más celebre es “Facundo” (1845).
Sarmiento nació un 15 de febrero de 1811 en Argentina. Don Domingo reconoció que en Chile fue donde pasó los mejores años de su vida y donde anduvo, se preocupó de fundar escuelas, la educación fue su preocupación constante. Llegó a Chile producto de las luchas internas entre los federalistas y los unitarios (en la cual el participaba), donde se producía mucha inestabilidad institucional y presencia de caudillos, llevando a que personas con gran relevancia intelectual tuvieran que emigrar por eminente peligro de sus vidas. Situaciones que casi no ocurrieron en Chile gracias a la visión que tuvo nuestro prócer Bernardo O´Higgins.
Don Domingo en el año 1831 y para sobrevivir se puso a trabajar de maestro aprovechando sus capacidades en la escuela municipal de Los Andes. Después lo encontramos en 1833 en Valparaíso, posteriormente se embarca hacia el Huasco y de allí a Copiapó para trabajar como mayordomo en Chañarcillo. En 1836 se enfermó y regresó a su patria, recuperándose y recibiendo la ayuda de un doctor Aberastain pudo desenvolverse y mantenerse. En 1839 lo encontramos como editor del periódico Zonda en el cual escribió la mayor parte de los artículos. Por revueltas en Argentina Sarmiento nuevamente debe venirse a Chile quedandose en Santiago, conociendo a José Victorino Lastarria e iniciándose una amistad que permite que se le publique un artículo en el Mercurio de Valparaíso el 11 de febrero de 1841 con el título “12 de febrero de 1817”, alcanzando una buena crítica que permitió que fuese contratado, estando hasta fines de agosto de 1842.
Posteriormente lo ubicamos en Santiago donde se hace cargo de la redacción del periódico El Nacional que apoyaba la candidatura de Manuel Bulnes Prieto, relacionándose con don Manuel Montt y al vencer en las urnas tuvo otros privilegios, pero el estaba preocupado de lo que pasaba en Argentina y por ello, marcho nuevamente hacia allí, no alcanzando su objetivo y ello permitió que en Chile se le encomendara la misión de crear una Escuela Normal de Preceptores que fue fundada un 18 de enero de 1842 y con Sarmiento como su Director. Además, fue enviado por el gobierno chileno a Europa y Estados Unidos y fruto de ese viaje y experiencia se diseñó el Método de Lectura Gradual (1849) que se utilizó por muchos años.
En los años 1852 regresa a Argentina participando en la vida política donde va ejerciendo diversos cargos; Gobernador en la Provincia de San Juan, Presidente de la Argentina entre 1868 – 1874, Senador de la nación, embajador en varios países. Terminado su mandato siguió teniendo participación en la política para fallecer en 1888 en Asunción, Paraguay.
De allí, que considero muy interesante la presentación del libro “Minas y Cateadores” de don Domingo Faustino Sarmiento que corresponde a crónicas que se descubrieron hace poco tiempo, sobre la minería de Atacama y Coquimbo y donde esperamos conocer conceptos desconocidos sobre la explotación del suelo atacameño ya que, sabía por haber sido minero genuino, lo que le permitió conocer al habitante con su idiosincrasia, leyendas, culturas y hazañas. El prólogo es del académico e investigador minero Claudio Canut de Bon y la presentación será este martes 03 de septiembre a las 18:30 horas en la Sala Biblioteca del Museo en Argentina y el día viernes 27 de septiembre a las 19:00 horas en la Biblioteca Pública de La SERENA a cargo de Arturo Volantines (Chile) y José Casas (Argentina).
Octavio Álvarez Campos