La solidaridad de los ovallinos, la organización ciudadana como respuesta ante la delincuencia, el importante rol de los medios de comunicación locales y la absoluta indiferencia de las autoridades políticas son parte del análisis tras la situación vivida por una familia que fue víctima del «cuento del tío» en nuestra ciudad.
Los hechos registrados la noche del pasado miércoles y los momentos de verdadero terror que vivió una familia de la Villa El Portal, tras ser víctima del «cuento del tío», realizado con la modalidad del falso secuestro de dos menores, pone varias situaciones en relieve que, a esta altura, podemos visualizar mejor y con más calma.
La indefensión de las familias ante la delincuencia es total. Los sujetos que perpetraron este delito, tienen un nivel de información importante sobre quienes están llamando y son expertos en obtener más datos, aprovechándose del momento de pánico que causan en la o las víctimas.
Ante eso, lo importante es conversar como grupo familiar sobre esta realidad, delimitando las formas de acción si es que sospechamos que estamos siendo víctimas de algún delito o estafa, pues la delincuencia va mutando y buscando nuevas formas de concretar sus fines. La organización de los barrios y el conocer a los vecinos se transforman entonces en una de las herramientas más importantes a la hora de hacer frente a este flagelo. La construcción del tejido social se torna imprescindible en ese sentido.
Las Redes Sociales y los medios de comunicación locales son cruciales a la hora de poder viralizar y expandir los contenidos y de poner en alerta a la ciudadanía. Como diario electrónico de Ovalle y la provincia, estaremos siempre dispuestos a colaborar en la difusión de hechos verificables y con fuentes fidedignas, con el fin de buscar la reacción de nuestros conciudadanos, pues creemos que la solidaridad es el primer pilar de una comunidad.
En OvalleHOY.cl creemos que lo que pueda ocurrirle a un niño o una niña, es responsabilidad de la sociedad toda. Y, en ese sentido, es preocupante que quienes están encargados de la Seguridad Pública en nuestro territorio, no tuvieran reacción alguna, plasmando mejor que nunca, la absoluta desconexión de la política y los políticos con lo que le sucede a la ciudadanía.
Ninguna autoridad civil se hizo presente en el lugar ni conversó con los afectados. Algunos podrían señalar y con justificada razón, que no sería mucho el aporte o que solo irían para la foto, pero al menos se da una señal en torno a que nos importan los temas que afectan a los ciudadanos y además, cumplo con la labor que me han encomendado. La delincuencia es la principal preocupación que tienen los chilenos, por si no lo recuerdan. Las palabras Desidia e Incompetencia flotaron espesando el aire de la Villa El Portal, esa noche de miércoles.
Nos quedamos con la forma en que muchos colaboraron con poner fin a una situación tan lamentable como es la que vivieron estos padres. Nos quedamos con la empatía de los ovallinos para con un coterráneo que veía caer su mundo, su familia. Porque lo importante era eso, una familia de nuestra comunidad estaba siendo afectada y se reaccionó ante ello.
Nos quedamos con la acción espontánea de amigos y parientes de los atribulados padres, que se coordinaron para concretar una verdadera operación rastrillo por las calles de la ciudad.
Nos quedamos con los miles de lectores que se enteraron a través de nuestro medio y cuya vista se agudizó y observaron con mayor detención su entorno, que se fijaron en los autos, en los colectivos y en los niños que pasaban a su lado, buscando a Josefa y Vicente.
Angelo Lancellotti González
Director