Así afirmó María Cecilia Martínez Salas, escritora, en sus palabras de despedida al destacado artista y escritor en la mañana de hoy al finalizar la misa fúnebre en la parroquia El Divino Salvador.
La hermana del destacado artista plástico Homero Martínez, también fallecido, puso de relevancia el amor que Pizarro siempre tuvo por su pueblo de Barraza, así como su labor en distintas área de la cultura que lo llevaron a ocupar un sitial fundamental en la provincia del Limarí. Hizo notar sin embargo que la labor más importante del desaparecido artista fue la de unir los mundos de la pintura y la literatura en su ”patria chica”.
La misa fúnebre fue oficiada desde las 11.00 horas de hoy jueves en la iglesia El Divino Salvador por el presbítero José Pérez, párroco de Punitaqui, con la asistencia de la familia del extinto, autoridades (la consejera regional Lidia Zapata y el concejal Patricio Reyes) , amigos de la familia, pero fundamentalmente gente del mundo de la cultura que llegaron a tributar la despedida a Pizarro.
En representación de la familia intervino uno de sus hijos Cristian Pizarro Rojas, el que puso de relevancia una faceta quizás desconocida u opacada por su fulgor como artista: el rol de padre, abuelo e hijo, quien se preocupó con amor entrañable de su madre hasta el último momento.
Finalmente agradeció a todos los que en las últimas horas han llegado hasta ellos, “acompañándonos en nuestro dolor y dándonos fuerzas para salir adelante”, afirmó.
Al término de la misa el féretro fue despedido con un prolongado y caluroso aplauso de los asistentes.
Sus restos fueron finalmente trasladados hasta el Cementerio Parque del Recuerdo ubicado en llanos de San Julián, para darle sepultura.