Con motivo del incidente de acoso sexual sufrido por una periodista de TVN Red Coquimbo días atrás, mientras ejercía su labor profesional, la Seremi de la Mujer y la Equidad de Género de la región lamentó el hecho en una declaración pública que, resumidamente, formulaba que:
- Había tomado contacto con la víctima y entregado todo el apoyo del respectivo Ministerio y el suyo personal.
- En conjunto con Sernam se le prestaría toda la ayuda que requiriera la profesional.
- Lo vivido por la periodista es una situación aberrante, hostil y humillante que se debe condenar con fuerza y para la cual no hay atenuantes que valgan.
- El gobierno del presidente Piñera condena todo tipo de acto que vulnere, atente o viole la integridad de una mujer, provenga de quien provenga.
- Reitera su más absoluto rechazo a lo sucedido.
Respecto a la referida declaración debo señalar, primeramente, que comparto en todos sus términos su contenido. En efecto, el hecho expuesto es gravísimo y merece también mi absoluto repudio y, por supuesto, el de todo ciudadano que respete la dignidad de las personas.
Sin embargo, el contenido de la declaración revela una cierta inconsistencia entre los juicios que hoy formula la Seremi y la actitud que tuvo en la entrevista que les concedió -en febrero del presente año- a las funcionarias del municipio ovallino que habían sido despedidas injustamente por el solo hecho de haber denunciado el acoso sexual y laboral del (ex) jefe del Departamento de Desarrollo Comunitario.
Al respecto, me pregunto:
¿Por qué les negó, en aquella ocasión, el apoyo del Ministerio y se mostró displicente frente a la gravedad de las denuncias? ¿La situación de cada una de las funcionarias no era acaso aberrante, hostil y humillante y merecía su condena más categórica?
¿Qué atenuantes observó en este caso para negarles el apoyo requerido y minimizar la gravedad de los hechos denunciados?
¿Primaron, en su negativa y displicencia, criterios puramente políticos?
Concluyendo: Es lamentable que una Seremi de Gobierno de un Ministerio tan importante como el de la Mujer y la Equidad de Género, mantenga -para la opinión pública- un discurso moderno, liberal y empático con los nuevos tiempos de la democracia representativa, y por otro – en casos como el expuesto – una actitud que lo niega de manera indesmentible.
Fernando Ortiz Carvajal
C. Id. : 5.303.993-6
