La anécdota fue consignada hoy en el diario electrónico Combarbalá Noticias de la comuna estrella, denunciando la preocupación de vecinos por la presencia de animales en calles céntricas de Combarbalá.
“Los animales sueltos en la ciudad no solo causan daño a los jardines y espacios públicos, sino que además suponen un acto de irresponsabilidad de sus dueños, los que al parecer no se preocupan de mantener a estos animales con sus respectivas riendas o amarras y lejos de donde pueden causar temor.
Hasta el frontis de Banco Estado llegó Carabineros de la subcomisaría de Combarbalá para retirar al caballo y ponerlo a disposición del corral municipal. Recordemos que el dueño del ejemplar se expone a un parte policial o municipal por no resguardar debidamente al animal a su cargo”, agrega la nota.
Esto, que puede ser algo pintoresco, es aún una realidad también en Ovalle donde cada cierto tiempo caballos, vacunos, e incluso burros aparecen en calles de poblaciones o ramoneando en un prado o jardín público o privado. Incluso corriendo entre los vehículos.
Despues de todo aún somos ciudades con fuerte presencia rural. ¿no?