La iniciativa es parte del Proyecto de Ley presentado recientemente por Fundación Vegetarianos Hoy junto a los diputados Tomás Hirsch y Daniella Cicardini, que busca garantizar estándares de bienestar animal en la industria acuícola. • Con ello, Chile seguiría los pasos de Suiza, Noruega, Nueva Zelanda y Reino Unido, los únicos países en el mundo que han legislado en la materia para reducir el sufrimiento de estas especies.
Una de las más vanguardistas y revolucionarias propuestas animalistas en el mundo busca hacerse realidad en Chile. Se trata de la iniciativa que pretende prohibir la cocción de animales acuáticos vivos, uno de los grupos más olvidados en cuanto a protección animal.
Con esto, Chile integraría un selecto grupo de países que ha legislado sobre el tema, uniéndose a Suiza, Noruega y Nueva Zelanda, mientras que actualmente en el Reino Unido se está discutiendo la misma materia. En este último caso, este punto se sumó en julio pasado al proyecto de ley de Bienestar Animal que tramita el Parlamento y que, entre otros puntos, reconoce a todos los animales como seres sintientes.
En el caso de Chile, la propuesta forma parte de un Proyecto de Ley presentado recientemente por la Fundación Vegetarianos Hoy, la mayor organización de protección animal en el país, junto a los diputados Tomás Hirsch (Acción Humanista) y Daniella Cicardini (Partido Socialista).
El proyecto, presentado el pasado 23 de septiembre ante la Cámara de Diputadas y Diputados, tiene como objetivo fijar normas que garanticen estándares de bienestar animal para peces y otros animales de producción acuícola, en todas las instalaciones donde animales acuáticos de producción sean mantenidos, producidos, criados, cosechados, transportados y/o sacrificados.
El proyecto también cuenta con el apoyo de los diputados Claudia Mix (Comunes), Jorge Brito (RD), Catalina Pérez (RD), Diego Ibáñez (CS), Karol Cariola (PC), Marcelo Díaz (UNIR) y Cristina Girardi (PPD).
Sobre la propuesta, la diputada Pérez expresa: «Este proyecto es fundamental para ir avanzando hacia un nuevo concepto de relación entre animales humanos, animales no humanos y naturaleza. Implementar criterios éticos es urgente, una necesidad, no un capricho como algunos han querido hacer ver. Esperemos que este proyecto, que se refiere específicamente al ámbito del bienestar de peces avance, pero también que otros proyectos de bienestar y protección animal avancen y que por fin logremos dejar atrás esa idea de que los animales no humanos son recursos para ser aprovechados».
Desde la Fundación, el Proyecto de Ley forma parte de una iniciativa mayor: la campaña #IndividuosNoToneladas, que tiene por fin concientizar e informar sobre los habitantes acuáticos y lo que sufren debido a la pesca y acuicultura. “Históricamente los animales acuáticos son los más olvidados en las discusiones sobre la sintiencia y sufrimiento. Sin embargo, con evidencia científica se ha demostrado que los peces y otros animales acuáticos son seres sintientes, por tanto, su bienestar es tan importante como el de cualquier otro animal terrestre”, explica la directora general de la ONG, Ignacia Uribe.
¿QUÉ DICE EL PROYECTO?
En cuanto a los estándares de bienestar que busca establecer el proyecto de ley, se considera que, durante la etapa de reproducción, mantención, producción, crianza, cosecha o manipulación de estos seres, se garantice un entorno enriquecido, tener en cuenta la manipulación del fotoperiodo, la composición del alimento, los requisitos de espacio y densidad de población, y la calidad del agua según la especie.
Durante todo el proceso de transporte, tomando en cuenta la carga y descarga de los animales, se deberán respetar tiempos apropiados que permitan garantizar el máximo nivel de bienestar de los animales, realizando las operaciones en el menor tiempo posible y garantizando un manejo humanitario, procurando siempre el bienestar de las especies.
El proyecto también instaura que durante el sacrificio de los animales se deberá asegurar el aturdimiento rápido, total e irreversible antes del sacrificio, de modo que cada animal no experimente dolor. Además, si es necesario para maximizar el bienestar, el animal debe ser sedado o inmovilizado mediante trato humanitario antes del aturdimiento.
Destacable también es la prohibición de exhibición y venta de animales acuáticos vivos en cualquier instalación como también la cocción de animales acuáticos vivos.