En el centro de Ovalle, separados por no más de cinco cuadras hay letreros que parecen no tener ninguna justificación.
O si la tienen, pues en su momento fueron instalados por acuerdo del Concejo Municipal o un Departamento de ese servicio, nadie los lleva de apunte. Ni quiera carabineros, que son los encargados de la ficalización de la respectiva norma.
Empecemos por el que está en la acera de Ariztía Poniente, a pocos metros de Vicuña Mackenna, que dice “Prohibido Comercio Ambulante”. Y justamente desde punto hasta la misma calle Libertad… ¡la acera está cubierta de comerciantes ¡!
Sigamos por el paseo peatonal hacia la plaza de Armas y en una de las esquinas podemos encontrar otra señal que advierte de la prohibición de circular con bicicletas. Y si nos detenemos unos minutos observamos como pasan ciclistas en uno u otro sentido, a baja, mediana o alta velocidad, en línea recta o zigzagueando entre los transeúntes. El alcalde mismo a veces pasa por el lugar en su máquina de dos ruedas.
Luego llegamos a la Plaza de Armas y en calle Victoria, entre Vicuña Mackenna y Libertad, hay dos letreros que prohíben el estacionamiento en el lugar. Cuando fueron instalados se explicó que era para incorporar una pista de circulación mas para ayudar a descongestionar el centro de la ciudad.
¿La mala noticia? Es que ese tramo de calle pasa lleno de automóviles estacionados.
No es por ponernos densos, lingotes, pesados, etc, pero si en algún momento que no nos enteramos estas normativas dejaron de tener efecto… entonces ¿Porqué mejor no sacan los letreros, y ya?
