La iniciativa ha significado un aporte para hacer surgir a agricultores y crianceros combarbalinos de la comuna limarina, con proyectos de inversión que han permitido concretar sus anhelos de negocio.
Sin duda Combarbalá es una comuna caracterizada por el empoderamiento de sus pequeños productores agrícolas, quienes constantemente logran salir adelante gracias al apoyo de diversos entes estatales a través de sus distintas herramientas e instrumentos.
Uno de ellos es el Programa Zonas Rezagadas, ejecutado -entre otros- por el Instituto de Desarrollo Agropecuario (INDAP). Un ejemplo de apoyo es posible encontrarlo en el interior de la comuna limarina, exactamente en el sector de Soruco, lugar donde se encuentra la casa de Danitza Bugueño, una emprendedora agroecológica que cansada del ruido de Santiago decidió, junto a su marido, radicarse en la región para dedicarse a la venta de aceite y ungüentos de la flor de la caléndula.
La alta propiedad cicatrizante, antinflamatorio y antiséptica de la planta -de origen europeo-, sumado al anhelo que tiene la usuaria de INDAP por ver surgir su negocio han llamado la atención de muchas revistas e instituciones, quienes le han brindado ayuda tanto financiera como de oportunidades para darse a conocer.
Es en este sentido que tanto Danitza como muchos productores rurales de Combarbalá recalcan la importancia que ha tenido la llegada a sus vidas del Programa Zonas Rezagadas, herramienta enfocada en dar mayores y mejores oportunidades a los territorios considerados de rezago.
“Constantemente sufríamos por los cambios climáticos existentes en la zona, ya que de repente una helada podía matar todos nuestros cultivos, y cansados de la situación decidimos postular a un proyecto de Zonas Rezagadas consistente en una caseta sombreada que se adecuara a las condiciones del clima. Hoy la obra está ejecutada y puedo decir que esto da paso a cumplir mi sueño de crecer, porque la infraestructura me asegura el resguardo y la opción de aumentar mi producción. Agradecemos a INDAP y al programa, porque ellos nos creen y nos apoyan mucho”, indicó Bugueño.
Para Danitza, dentro de sus planes a futuro está la idea de exportar fuera del país y aumentar la variedad de cultivos con productos como la moringa o la quinoa. Pasos en los cuales sin duda el impulso amigo del Gobierno estará presente para aportar con las herramientas e instrumentos necesarios.
Combarbalá, Nueva Tierra de Oportunidades
Por otra parte el Jefe de Área INDAP Combarbalá, Álvaro Astete, señaló que “para INDAP la herramienta ha sido una gran ayuda, nos ha permitido igualar la cancha y por lo mismo la gente pide la continuidad de esta medida presidencial. En Combarbalá en solo 3 años llevamos más de 300 beneficiados con proyectos de inversiones considerables, para ellos es realmente una gran ayuda. Estamos muy feliz por Danitza y por todos los demás”.
El coordinador regional de Zonas Rezagadas, Cristian Herrera, manifestó que “el programa ha tenido resultados bastante positivos en Combarbalá y estamos seguro que junto a INDAP realizamos lo correcto. Recientemente hemos visitado grandes proyectos, como lo son las cortinas interceptoras de aguas lluvias, y como ejemplo tenemos la implementación de la caseta de Danitza para sus novedosos productos. De esta manera estamos potenciando fuertemente la innovación, tanto en los procesos como en la producción misma, permitiendo a los beneficiados abaratar costos y diversificar sus cultivos”.
Es importante indicar que el Programa Zonas Rezagadas es una medida presidencial del Gobierno de la Presidenta Michelle Bachelet, y desde el 2014 se encuentra en su fase piloto. Junto a Combarbalá, en la región de Coquimbo esta iniciativa también considera las comunas de Monte Patria, Canela y Punitaqui.