Este lugar que a diario es ocupado por ovallinos de la parte alta que desean acceder al centro de la ciudad, pertenecía a la Congregación San Juan Bautista, quienes durante años esperaron la respuesta del municipio para su compra, lo que, finalmente, se concretó con el pago de ochenta millones de pesos, provenientes de fondos propios de la entidad consistorial.
Como un hecho histórico fue calificado por las integrantes de la Congregación San Juan Bautista, la compra de los terrenos, por parte del municipio de Ovalle, del sector conocido, popularmente, como “La Rampa”. Este lugar ubicado en las cercanías del Parque Sesquicentenario es utilizado, a diario, por cientos de ovallinos que optimizan el tiempo para acceder a la zona céntrica de la ciudad.
Por años esta situación se mantuvo en trámite, pues en anteriores administraciones municipales se hicieron acuerdos con las representantes religiosas, pero nunca se pudieron concretar. Pero ahora el panorama es distinto, ya que gracias al buen manejo de las finanzas que realizó el municipio de Ovalle durante el 2013, permitió dejar un excedente de 1.165 millones de pesos para obras comunitarias. Dentro de ellas estaba la compra de los terrenos de esta zona, la cual tuvo un costo de 80 millones de pesos, que fueron financiados, en su totalidad, con recursos propios de la entidad consistorial.
La ceremonia de traspaso se efectuó en dependencias municipales y contó con la presencia del alcalde Claudio Rentería, miembros del Concejo Municipal y representantes de la Congregación San Juan Bautista, quienes se mostraron felices, ya que, desde su llegada a Ovalle, en la década de los 40, querían regularizar este tema.
Al respecto, la hermana Patricia White indicó que es muy importante que se haya regularizado “este traspaso de terrenos y nos da alegría de conocer personas que representan la ciudad de Ovalle y que tienen ganas de escuchar y dialogar, pues esto nos renueva la confianza, que no todas las personas son cerradas en sí mismas. Nos da gusto saber que el alcalde piense en el bien común y nos haya solucionado este tema, por lo que estamos muy agradecidos”.
Por su parte, el alcalde Claudio Rentería afirmó que es un orgullo “hacer un aporte más a la comunidad, sobre todo con la compra de este sector, que es un patrimonio de todos los ovallinos. Aparte me deja muy feliz que hayamos concretado este hecho, en un periodo de 10 meses, con la aprobación del concejo municipal y con recursos municipales, pues durante muchos años no se dio respuesta a este tema”. Rentería agregó que ahora “trabajarán en elaborar proyectos para mejorar esta zona de Ovalle y darle un rostro distinto a la conocida rampa”.
