Todas y todos sabemos que dentro de la agenda pública y la preocupación de las y los vecinos, actualmente el tema de seguridad es relevante. Y precisamente, hemos avanzado decididamente en una agenda de seguridad que incluye la puesta en marcha del plan Calles Sin Violencia, además de valorar enormemente medidas como el traspaso y aumento de recursos a municipios de forma directa, entre muchas otras medidas.
Precisamente, y en nuestro recorrido por las comunas de la región, y el contacto con diversas juntas de vecinos, organizaciones sociales hemos notado la importancia en la articulación y recepción de estas y otras preocupaciones y necesidades de las y los dirigentes sociales. Son ellas y ellos, quienes de forma histórica han desempeñado un papel primordial en establecer una relación directa y continua con el Estado, canalizando la realidad que viven sus barrios, sus integrantes, sus trabajadoras y trabajadores, y permitiendo con esto avanzar de forma real en una lucha incansable contra la inequidad territorial.
Pero también, son ellas y ellos quienes muchas veces se ven enfrentados a una realidad compleja, en la cual también necesitan ser protegidos y resguardados, especialmente en relación a que seamos capaces como Estado de garantizar que puedan realizar su labor de forma segura y permanente. Es por esto, que realizamos una serie de jornadas de trabajo, para conocer la realidad que enfrentan en materia de seguridad, los desafíos y necesidades que viven y la forma de abordarlos.
De ese gran trabajo, en el cual tuvimos una gran y activa participación en diversas comunas de la región, han nacido una serie de iniciativas, entre las cuales por ejemplo presentamos un Proyecto de Resolución, mediante el cual solicitamos al Gobierno la creación de una credencial – demanda histórica – que acredite su calidad de dirigentes, lo que permitirá hacer más expedita una serie de gestiones, además de identificarlas e identificarlos frente a situaciones que pongan en riesgo su seguridad y la de a quienes representan. Además, solicitamos mediante dicho proyecto la creación de un seguro de vida, junto con la creación de convenios en materia de transporte público que aseguren que puedan trasladarse de forma segura dentro de sus territorios.
También, avanzamos en un proyecto de Ley que aumenta las penas para quienes agredan, intimiden y afecten el patrimonio de las y los dirigentes en el ejercicio de sus funciones, algo solicitado de forma transversal y que viene a recoger la necesidad precisamente de proteger su integridad, sus vidas y también la labor trascendental que realizan. Seguiremos trabajando de forma decidida y sin descanso en dicha vía, pues proteger a las y los dirigentes es proteger a las y los vecinos, y también robustecer una relación que es primordial para hacer comunidad y fortalecer la democracia y equidad territorial.
Carolina Tello
Diputada de la República
