Si algo ha causado polémica por estos días, es la nueva ley de control de identidad. Dicha medida, faculta a uniformados para realizar controles a mayores de 18 años que se encuentren en la vía pública.
La regulación, si bien facilita la aplicación efectiva de penas pendientes por robo, hurto y receptación, también autoriza a Carabineros para que por motivos que ellos estimen convenientes soliciten la cédula de identidad a cualquier transeúnte, este es el punto que ha generado un intenso debate dentro de nuestra sociedad.
Por esta razón, OvalleHoy.cl salió a las calles de nuestra ciudad para conocer la impresión de los ciudadanos respecto a un tema que no deja indiferente a nadie.
“Encuentro que es importante que exista un control para todas las personas que están en un lugar que se pueda prestar para un delito, es importante que Carabineros tenga un sistema que le permita prevenir robos, asaltos y cualquier tipo de infracciones que se puedan realizar en Ovalle, es una forma de prevenir los delitos, así que estoy de acuerdo”, señaló Luis Navarro quien en compañía de su pareja transitaba por el paseo peatonal de la ciudad.
Por otra parte, totalmente en desacuerdo con la medida, el abogado Claudio Araya Castillo profundizó en que “el control de identidad, entre otras cosas, es la demostración de que la Nueva Mayoría no se puede desligar de los resabios autoritarios del tiempo de la dictadura, vamos a ver dónde harán controles de detención, en las poblaciones humildes o afuera de los sectores acomodados”. Además, señaló que “esto se prestará para abusos, se va a controlar al humilde, al pobre, al vendedor ambulante, al niño que va en la marcha estudiantil con gorro de lana, etc.”
Daniel Alfaro, que junto a su hija paseaban por la Plaza de Armas, indicó que “encuentro que está bien que carabineros pueda controlar a una persona con su cédula de identidad, yo ando todos los días con mi carnet independiente de por qué salga a la calle, no encuentro nada de malo ya que una persona debe andar con su cédula en cualquier momento”.
María Isabel Santos, trabajadora de una galería ubicada en calle Benavente, declaró que “es una forma preventiva de saber los antecedentes penales con que cuentan cada individuo y para que así cumplan sus condenas o lo que tienen pendiente, es una forma muy buena”.
Rubén Jopia Campos, mientras observaba el show clásico de retretas dominicales, señaló que la medida tenía sus pro y contras. “Es bueno y malo ya que de repente una persona que no tiene que ver y que no es delincuente se va a molestar si le piden el carnet porque no estamos acostumbrados a eso, pero también servirá para detener delincuentes que tengan causas pendientes, que utilicen carnet falsos, etc”, remató.
Por Camila González Espínola.
Periodista.
