Desde el 29 de septiembre que se mantienen las movilizaciones debido a que el reajuste propuesto por el gobierno es inferior a los que exigen los funcionarios fiscales.
El gobierno despachó el proyecto de ley con un reajuste de 3,2%, lo que causó molestias entre los funcionarios del sector público, pese a ser aprobado por el senado. Posteriormente la moción pasó a la cámara baja, donde fue rechazada sin ningún voto a favor, lo que significó que dicho proyecto fuera tramitado en una comisión mixta, donde nuevamente no se logró llegar a acuerdo por los parlamentarios. Finalmente, el día de ayer, tras nuevamente ser revisado por la Cámara de Diputados- el documento que esta vez contaba con un Veto Aditivo presidencial que reponía un reajuste de un 3,2%, – fue rechazado y los funcionarios decidieron continuar con la paralización de sus actividades.
La última observación presidencial o Veto Presidencia, reincorporaba un bono especial de 104 mil pesos para los trabajadores con una remuneración líquida igual o inferior a 550 mil pesos; de 75 mil pesos, para los que perciban remuneraciones sobre dicho monto y sea menor a los 770 mil pesos; y 38 mil pesos para los que tengan remuneraciones sobre los 770 mil pesos y hasta los 920 mil pesos, sin embargo, fue rechazada por 47 votos a favor, 11 en contra y 49 abstenciones, lo que significa el fin de su tramitación en el Congreso, y que la transformación del proyecto en ley, para hacer efectivos otros beneficios que se incorporan en el texto legal y que sí fueron aprobados en el Poder Legislativo.
No obstante, el reajuste anual debe hacerse por ley, por lo que el llamado de los parlamentarios de diversos sectores es a formar una mesa de negociación con los trabajadores públicos. Ante esto, dirigentes locales expusieron que el paro adquiere carácter indefinido hasta no llegar a acuerdo con el Gobierno.
Por su parte, Patricia Fernández, auxiliar de servicio JUNJI, señaló “para nosotros fue mejor el rechazo del proyecto, porque así se puede establecer una mesa de diálogo y llegar a un acuerdo”. A su vez, la funcionaria manifestó comprender la molestia de los usuarios, pero hizo un llamado a la compresión, “nosotros entendemos que esto moleste a las personas, pero pedimos el apoyo, porque esto es algo que nosotros necesitamos como gremio, ya que, necesitamos dignidad en nuestros trabajos y a diferencia de lo que la gente cree, nuestros sueldos no son exuberantes, al contrario, muchas veces son bajos.
Paloma Olivares Beltrán
