Cuando se hacen trabajos en la vía pública para la reposición de pavimentos en una ciudad, los encargados tienen que cumplir con algunas condiciones mínimas antes de hacerlo.
Esto es solicitar los correspondientes permisos al Serviu, y al departamento de Obras Municipales, que son los encargados de supervisar la calidad del trabajo que se está ejecutando y fiscalizar que este llegue a buen término.
Pero además, sea que los trabajos se efectúen en la calzada o en la acera, se debe dar cuenta al Departamento del Tránsito dando a conocer las medidas que serán adoptadas para garantizar el normal tránsito de vehículos y de peatones. Y la seguridad de ambos.
El lunes sin embargo en calle Vicuña Mackenna, a alrededor de veinte metros al poniente de la Municipalidad de Ovalle, se realizaron trabajos de reposición de un tramo de acera. Algo pequeño, en verdad, no más de dos pastelones. Y para evitar que el cemento fresco fuera afectado por el paso de personas y animales, los encargados instalaron protecciones de mallas plásticas.
El único detalle es que olvidaron adoptar medidas de resguardo para el público que, para transitar necesariamente deben bajar a la calle arriesgándose de ser alcanzados por algún vehículo. Hasta el momento no ha habido problemas, porque los conductores han sido cautelosos al pasar, pero… y si ocurre un accidente?.
Hechas las consultas en el Departamento del Tránsito aseguraron que ellos no habían sido notificados de los trabajos, comprometiéndose a contactarse con los encargados para que eso ocurra.
Al menos a instalar un par de conos de colores que adviertan a la distancia a los conductores la existencia del riesgo, y que los transeúntes puedan pasar por el interior de estos con cierto mayor resguardo.
M.B.I.