El imputado, la noche del accidente, manejaba a alta velocidad con las luces apagadas, y la licencia d vencidas por una sentencia anterior por conducción en estado de ebriedad.
Los hechos ocurrieron pasadas las 23.00 horas del jueves 6 de este mes en la ruta D- 505 que comunica con la localidad de Limarí, sector Canchas Juegue, en la salida poniente de Ovalle.
En ese lugar se produjo el atropello, con resultado de muerte, de una persona que posteriormente fue identificado como Eduardo Arias Castillo, de 35 años. El conductor huyó del lugar.
Las investigaciones de Carabineros entrevistando a testigos y revisando las cámaras de seguridad existentes en el sector permitieron tener el conocimiento de las características y matrícula de un vehículo sospechoso. Se trataba de una camioneta Toyota Hilux de color negro pizarra, hasta lograr en las últimas horas ubicar al conductor en un domicilio de la Población El Manzano, donde también estaba la camioneta.
El detenido, identificado como R. A. L.R. de 30 años de edad, fue formalizado en la mañana de hoy en la sala 2 del Juzgado de Garantía de Ovalle por el presunto delito de huir del lugar del accidente sin dar cuenta a la autoridad ni prestar atención a la víctima con resultado de muerte.
El fiscal Jaime Rojas Maluenda explicó en el tribunal que se logró la identificación del sujeto por el testimonio de distintas personas que en los momentos previos a la tragedia se encontraron con el imputado, en estado de ebriedad y manejando la misma camioneta. Uno de estos hechos ocurrió a la salida de un servicentro cuando el vehículo estuvo a punto de embestirlos cuando ellos se encontraban con un desperfecto mecánico en la ruta.
Con las imágenes de las cámaras de seguridad del Servi centro se logró obtener las características y la patente del vehículo, lo que en las horas siguientes, con la autorización verbal del juez de turno permitió llegar hasta el domicilio en la población El Manzano, que aun mantenía los daños producidos por el atropello . El mismo imputado aún mostraba en su rostro señales de los golpes con la cabina del vehículo.
R. L., no solo tenía la licencia de conducir suspendida por una sentencia del 2015 por manejo en estado de ebriedad, sino además CUATRO sentencias anteriores por el mismo delito.
No obstante la oposición del defensor Hugo Lagunas Gallardo, el tribunal concedió la medida cautelar de prisión preventiva para el imputado por constituir su libertad y peligro para la seguridad de la sociedad, con una plazo de investigación de 90 días.
El Fiscal Rojas Maluenda adelantó que no descarta recalificar la acusación a manejo en estado de ebriedad con resultado de muerte, que tiene una penalidad superior. Cualquiera sea el delito, L. R. si es condenado, deberá cumplir la pena de manera efectiva sin derecho a beneficios.
