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A mi madre Ana Ester Castillo Rojas a 12 años de su partida.

 “Amamos a la madre casi sin saberlo; y tan sólo percibimos toda la profundidad de las raíces de este amor en el momento de la última separación”    (Guy de Maupassant)

Hoy cuando el ritmo trepidante de la vida y donde el ir y venir es cada vez más apresurado se hace necesario ocuparnos de una de las cosas más importantes de la vida como es “RECORDAR LA PARTIDA DE LA MADRE”-

Ya han pasado 12 años de la partida de mi madre y a pesar de ello su presencia sigue viva en mi persona y tal como lo he hecho en años anteriores  rindo  un homenaje sencillo y cariñoso a través de palabras escritas para la mujer que me regaló la vida y de quien guardo su imagen y figura como el mejor de los tesoros.

Hablar de la partida de la mujer que me regaló la vida, recordar cada una de sus enseñanzas, acercar el pasado al presente con su figura y acortar el lazo de separación física con uno que otro recuerdo  son tal vez sensaciones, que muchos de los seres humanos experimentamos con el correr del tiempo.

Cuando alguien que amamos parte de esta vida difícilmente lo superamos y,con el tiempo aprendemos a seguir lentamente sin su presencia y vamos guardando en esa cajita de pandora  todas aquellos aspectos importantes que le dan sentido a nuestras vidas :experiencias, encuentros, sentimientos y recuerdos y así  seguimos este caminar  con menos dolor y tristeza.

Hoy cuando miro su jardín,puedo darme cuenta que ella  vive escondida en cada pétalo de cada una de  sus rosas.

 Pretender olvidar la historia de mi madre ,sus luchas incansables, sus superaciones y por sobre todo la esencia de ser humano que era ,es algo que  sería imposible olvidar, porque para una hija el referente femenino más importante es SU MADRE y así  vamos proyectando por la vida lo que APRENDEMOS DE ELLA.

 Mi madre  es esa  llama que siempre está encendida y que jamás se apaga ni se apagará porque a pesar de no estar hoy a mi lado la pienso y la abrazo por todo ese amor que me regaló. Innumerables  recuerdos hoy permanecen intactos en mi vida y en el que fue  nuestro hogar. Cada uno de ellos  trato de acariciarlos con el más dulce de los pensamientos y ahí es cuando  llega a mi mente la  palabra: ”AGRADECIMIENTO”.

AGRADECER ese infinito amor de traerme al mundo, agradecer por todo lo alcanzado, agradecer el haber sido mi compañera por 45 años, agradecer por permitirme ser tu hija, agradecer por cada palabra de consuelo cuando todo se desplomaba, agradecer por ser ese faro que me guió mientras estuvimos juntas y por sobre todo AGRADECER el enseñarme a volar cuando su partida se hizo inminente.

 Fuiste una GRAN MADRE y una ABUELA INSUPERABLE sin tu fuerza y tu valentía enseñada hoy no estaría escribiendo estas palabras para ti. Una vez más, GRACIAS por todo y siempre que la vida me lo permita habrá palabras expresadas para la mujer que aún a pesar de sus días grises intentaba colorearlos usando la mejor de las acuarelas.

Hoy 23 de enero de 2021 levanto una oración a Dios por haber bendecido mi vida con la amada presencia de mi madre mientras estuvo acá en la tierra .Que ella sea la luz para lo que me quede de vida.

MI MADRE FUE EL MEJOR REGALO QUE DIOS ME DIO Y LA FLOR MAS BELLA QUE JAMÁS CONOCÍ.

 TODO LO QUE SOY SE LO DEBO A MI MADRE

Tu hija que JAMAS dejará de “AMARTE Y RECORDARTE”

CARMEN GALLEGUILLOS CASTILLO

Hoy cuando miro su jardín,puedo darme cuenta que ella vive escondida en cada pétalo de cada una de sus rosas.
OvalleHoy.cl