InicioultimasOpiniónBolivia, una aspiración que puede aumentar su mediterraneidad.

Bolivia, una aspiración que puede aumentar su mediterraneidad.

Es interesante lo que está sucediendo en dicho país, donde, en un exceso de confianza, el actual presidente trató de eternizarse en el poder, pero el pueblo le dijo que NO, en parte por un debilitamiento político, por existir múltiples grupos disidentes dentro de su misma coalición y por aplicar lo acordado en el Foro de Sao Paulo que nos está llevando a la ruina en América, perjudicando a aquellos que se dicen representar. A una simple respuesta de “Si” o “No” se demoran dos días en reconocer el resultado, siendo que en Chile, pese a que se han elegido en forma simultánea un sinnúmero de autoridades, ha sido dentro de las 12 horas de cerradas las mesas. En el escenario actual, lo importante para nosotros es ¿cuál va ser la actitud del presidente boliviano?, ya que va a tener que religitimarse  y para ello puede buscar un acrecentamiento del anti chilenismo por parte de un sector del grupo gobernante.

Ante esto es válido recordar que nuestra relación con Bolivia es cíclica, cada 20 años más o menos, en los cuales se ha hablado de “hacer un corredor al norte de Arica” (González Videla-Truman), el encuentro de Charaña donde Pinochet y Banzer hablan de un corredor, entre otros. Pero todo se acaba cuando surgen los conflictos internos en Bolivia y no convencen a los peruanos en aceptar el acuerdo.

Chile dentro de su visión del tema tiene dos líneas de pensamiento; la primera es que debe haber una política firme, sin ceder terreno, debido a que si se llega a algún arreglo, no se conformarían y seguirían con nuevas demandas y la segunda es que no se puede mantener a largo plazo la primera postura, que hay que ser creativos y sería bueno darle un “corredor” con las compensaciones respectivas y así nos olvidamos de Perú.

Conversando con amigos y entendidos en el tema, vemos con escepticismo lograr algo concreto, debido a que el gran tope es Perú, que aspira a “recuperar” alguna vez dichos territorios y temiendo algo parecido incorporó en el Tratado de 1929, un protocolo complementario como resguardo, pensando que Chile podía cederle terrenos anteriormente peruanos, se estipuló que “Chile no cedería ningún territorio que hubiese sido peruano a Bolivia sin consultar primero al Perú”. Finalmente concluimos que como está la situación, a los bolivianos no les conviene perder la cualidad marítima que obtuvieron con el Tratado de 1904 y los múltiples beneficios que se les otorgaron y que a Chile le cuesta millones de dólares al año. Recordemos al historiador Oscar Espinosa (Bolivia y el mar 1810-1864), “Chile le concedió tantos beneficios, que a la simple vista parecía más que un vencedor, un vencido”.

Deberían aprovechar las oportunidades, más aún sabiendo la urgencia de China que con dinero fresco, esta apurando a Brasil para concretar el Corredor Bioceànico Central utilizando los puertos de Iquique y Antofagasta. Los estrategas chinos han comprendido que el Corredor que les interesa, pasa necesariamente por Chile que es un país geográficamente estratégico.

OCTAVIO ÀLVAREZ CAMPOS
PROFESOR DE HISTORIA Y GEOGRAFIA
COQUIMBO

OvalleHoy.cl