InicioOpiniónOpinión¡Como ha pasado el tiempo!

¡Como ha pasado el tiempo!

Como ha pasado el tiempo, sin más estamos terminando un año, siempre es bueno mirar hacia atrás y pensar si hemos cumplido las metas que nos hemos trazado.

Hay que mirar en profundidad al igual como se mira el agua que fluye en un río, y en el vemos que pasan tantas ramas, basura, y otros objetos que se lo lleva la corriente, también nosotros debemos mirar hacia nuestro interior y al igual que este río, dejar en esta corriente todas las penas, todos los sinsabores, todas las amarguras, todos los desencuentros, todo mal pensamiento, todo remordimiento, todo lo que nos aleja de lo verdadero del amor a Dios y a nuestro prójimo.

Que no se queden todas estas situaciones estancadas porque al igual que el agua se pudre, si nosotros nos quedamos estancados y no sacamos estas pesadumbres también vamos erosionando nuestra vida, nos hacemos daño, ya que si no nos la dejamos de lado, nos van limitando, vamos llenándonos de negatividad, de odio, de miedos, de soledad, de alejarnos del encuentro con el otro(familia, amigos(as), compañeros(as), vamos llenándonos de barreras, al igual que las casas que se van llenando de rejas y eso impide muchas veces que entre la luz, está todo sombrío.

Nuestra vida también puede caer en esta situación; es  así como vemos tantas personas que están enfermas con depresión, con desconfianza, con desamor, amargadas.

Demos vuelta la página descubramos en esta inmensidad de situaciones esa luz que llena completamente la vida de esperanza, si nos detuviéramos a apreciarla nos daríamos cuenta que todo esto nos empequeñece, pues su amor es más grande por cada uno(a) de sus hijos(as) muy amados, fortalece tu vida con este amor, aun sabiendo que volvieras a tropezar pero déjate guiar por Dios, descubre su mano esa que te levanta, que te acoge, que te consuela, que te apoya y todo ese amor te lo da gratuito, para que tú también derrames ese amor en medio de tu familia, amigos(as).

Pero en este mirar también esta agua nos coloca en la frescura, en la transparencia, es también así nuestra vida que hemos recogido en esta cosecha, pienso que cada uno(a) se va llenando de más experiencia, de más sabiduría, de más paciencia, de más amor, debemos siempre sacar a relucir este nuevo ropaje, haciendo de la vida un símbolo de esperanza, dejando atrás, aunque muchas veces cuesta todo lo que nos aparta del amor verdadero.

Agradecidos por todos los beneficios aunque muchas veces inmerecido, alcemos nuestras manos e inclinando nuestro cuerpo oremos a Dios por que sin él nuestra vida viajara sin rumbo, sin amor.

No nos dejemos atrapar por este torbellino que vivimos cada día sino realmente discernir hacia donde oriento la vida, con quien me quiero dejar conducir el resto de la vida.

No nos olvidemos que los tiempos de Dios son muy diferentes a los nuestros por eso debemos estar preparados cuando nos llegue el tiempo de reunirnos con Él, muchas veces dejamos pasar tantas cosas, tantas situaciones que vamos corriendo para el mañana lo que se debe hacer hoy.

Reconcíliate, perdona no dejes que te siga oprimiendo estos pensamientos, sino libérate y libéralos para dejar entrar nuevos vientos en tu vida, al igual que la semilla que cae al suelo se pudre y vuelve a aparecer con nuevos bríos, transformada en una planta o flor, así también cada uno(a) florezcamos a la vida con nuevas miradas, con nuevos desafíos, sintiéndonos privilegiados por este amor de Dios.

Hoy ya no quiero ser el mismo, sino ponerse al servicio de este Reino que Dios nos colocó para engrandecerlo con ejemplos concretos y desafíos para esparcirlo en nuestras familias, en nuestras comunidades, en nuestros trabajos, siento que es el mejor que podemos entregar a Dios.

Esta sonrisa que brota  es el mayor deseo por que he conocido a personas que al igual que yo tienen a Dios como guía, y sienten su amor desinteresado; esta cercanía y este amor, nos plantea un desafió, hacerlo extensivo a las personas que más amamos, a los más cercanos en nuestra vida.

Para cada uno(a) de Uds. las bendiciones de Dios, para sus familias y que este año 2022 sea lleno de buenos deseos.

                                                                                Hugo Ramírez Córdova.

OvalleHoy.cl