InicioultimasOpinión¿Cuán dispuesto estoy para acoger y perdonar?

¿Cuán dispuesto estoy para acoger y perdonar?

Será acaso que perdonar es algo que se pueda calcular, o será algo que debe estar siempre presente entre nosotros. Pero Jesús nos muestra cual es la actitud de Dios y como respuesta está a que aprendamos a perdonar.

¿Cómo es posible que no sepamos perdonar a quien nos ofende, cuando el Padre celestial nos perdona a diario mil veces más? ¿No son nuestras mutuas ofensas humanas algo pequeño en comparación de nuestras ofensas para con Dios? Quien no sea capaz de perdonar a su hermano, sencillamente no merece el perdón de Dios. Jesús no se cansa en reiterar ayer, hoy, mañana, que el advenimiento del Reino será de manera distinta a lo visto hasta entonces en el proceder humano.

El Reino de Dios por ser un acto de gracia o de amor gratuito parte de la reconciliación. Como lo hace Dios hay que acoger a todos nuestros hermanos, sin importar cuan pecador sean, el Reino acontece allí donde acontezca el amor gratuito, el perdón. Mientras el mundo no rompa con el perdón, el espiral de la venganza, no hará habitable la tierra. La llenará de odio y de violencia. Es una obligación personal y ser compasivo para con los hermanos(as), en agradecimiento a Dios, que lo fue con nosotros. Pero para dar pasos a esta reconciliación y perdón, es necesario avanzar cada uno(a) ir donde el hermano que ha hecho daño, y hacer gestos para perdonarlo, no quedando con el rencor, ni el odio guardado en el corazón. Uno debe dar el primer paso, no esperar que el otro lo haga, aunque nos cueste, sobretodo dejando de lado nuestras mezquindades, aprender del Padre misericordioso, de este Padre que es todo amor.

Quedemos con la enseñanza que Jesucristo insiste en cada página del Evangelio en anunciar la buena noticia del Padre que perdonará, y lo hace en todos los tonos hasta dar la vida y perdona a los que lo crucifican, a pesar de todo esto hay gente que insiste en la idea blasfema de un Dios castigador, rencoroso y vengativo.

Creer en Dios significa creer en su amor de Padre que siempre perdona, significa acogerse a su perdón, significa aprender a perdonar como Él lo hace con nosotros, para ser libres con la libertad de su amor.

¿Cuán dispuesto estoy para acoger y perdonar?

¿Qué gestos o acciones me pueden ayudar?

¿Cómo acojo en mi vida el perdonar y sentirse perdonado?

¿Cómo acojo en mi vida este llamado que Jesús me hace?

                                                                 Hugo Ramírez Cordova.

OvalleHoy.cl