InicioOpiniónBlogs / ColumnasDile NO a las drogas

Dile NO a las drogas

La semana pasada compartí con ustedes los resultados de la consulta ciudadana de Habla Chile, donde Habló Ovalle, respecto a ¿cuáles eran los tres problemas a los que debería dedicar un mayor esfuerzo en solucionar el Gobierno? Y dentro de la lista de las 19 posibles problemáticas una de las más votadas fueron las drogas, su combate, pues es un flagelo patente en muchas partes de nuestra comunidad.

Al ser éste un tema que a nuestra comunidad le interesa que se trate, que los políticos vuelquen su atención y estén en sus agendas de prioridades, debemos darle visibilidad al tema; es por ello que en ésta ocasión al ser un punto de interés me enfocaré como hice hace algunos años en otra columna al tema de la cannabis sativa. Que al igual que en esa ocasión ésta columna no se tratará de satanizarla, ni criminalizarla o que se despenalice, pues eso requiere de un análisis más detenido que por razones de espacio me enfocaré en los puntos que a mi juicio son más relevante para tratar el tema y precisamente me enfocaré en ésta planta porque es el punto de entrada para el consumo de otras drogas que van minando el buen vivir de nuestra sociedad.

Primero me gustaría partir aclarando que existen un sin números de mitos acerca del consumo de ésta planta, en donde inclusive se ha llegado a decir que es menos dañina que el cigarrillo, que no produciría dependencia y es más que trae aparejado con su consumo beneficios a la salud; pues bien, ninguna de dichas afirmaciones son correctas y mucho menos ciertas y de hecho ésta droga es tanto o más dañina que el cigarrillo; puesto que los riesgos que trae aparejado el consumo de dicha droga son altísimos, ejemplo de ello, es que el consumo de ella, produce con mayor frecuencia enfermedades bronco-pulmonares y determinados tipos de cáncer, a diferencia de las personas que no consumen, ya que contiene entre un 50% y un 70% más carcinógenos que el humo del tabaco.

Además de lo anteriormente dicho, ésta droga altera la memoria, el juicio y baja el rendimiento escolar ya que su consumo trae aparejado dificultades en el aprendizaje y en las tareas que requieren concentración, llegando a permanecer sus efectos por mucho tiempo en el organismo después de su consumo debido a su larga vida media. De hecho en los deportistas su consumo es sumamente perjudicial ya que éstos no logran el mismo rendimiento que tenían antes de dicho consumo o con sus pares que no consumen, puesto que el TCH (tetrahidrocannibiol) afecta los reflejos, movimientos y coordinación.

Situación que la podemos ver patente en el rendimiento de algunos jugadores del Arsenal quienes, durante el mes de agosto del presente año, consumieron una droga conocida como “hippy crack” que también es conocida vulgarmente como “gas de la risa” que tiene como efecto la generación de alucinaciones, ataques de risa, estados de euforia, problemas de coordinación, entre otras reacciones en el cuerpo y en casos de sobredosis puede causar incluso la muerte.

Por otra parte, ésta droga actúa como facilitadora del consumo de otras sustancias ilegales, puesto que,en distintos estudios, consta que existe una elevada asociación entre el uso de cannabis el consumo de tabaco, alcohol y otras drogas.

Es por ello que me atrevo afirmar, al igual que la vez anterior, que la marihuana es dañina para todos, pero muy especialmente para nuestros jóvenes puesto que ellos se encuentran en una etapa de su vida, en que cualquier mala elección sobre su salud, indudablemente le traerá aparejados problemas no sólo en el presente, sino en su futuro, con daños que serán permanentes e irreparables; por lo mismo, su consumo debe desincentivarse para proteger su salud.

Por todo lo anterior, al igual que en el momento en que me referí a éste tema con anterioridad, es que hago un llamado a los jóvenes a que cuiden sus cerebros y su salud en general, ya que los necesitamos no sólo en el futuro, sino ahora, en el presente, la vida es hermosa, es un regalo que debemos atesorar y cuidar. Por eso hay que decirle SÍ a la vida, amarrarse a ella y decirles NO a las drogas.

Susana Verdugo Baraona

OvalleHoy.cl