Los vecinos de la calle Yungay esperaron el paso de la carroza mortuoria con sus rejas adornadas con globos blancos y negros y participaron de un breve responso celebrado en el frontis de la vivienda, en plena calzada.
La señora Gloria Castillo falleció el lunes pasado el mediodía como consecuencia de un inesperado contagio de Covid-19 que obligó a internarla en el Hospital Provincial de la ciudad, sin que pudiera recuperarse.
Ella, junto a su marido José Luis Muñoz han mantenido en las últimas décadas uno de los almacenes más conocidos y populares del barrio Yungay, casi esquina de Augusto D´Halmar, en el que atendían con dedicación y cordialidad a sus clientes.
El miércoles, luego que los restos de la señora Gloria fueran retirados desde el Servicio Médico Legal, el cortejo fúnebre recorrió las calles céntricas hasta llegar a la población Fray Jorge y detenerse unos minutos frente al domicilio de la extinta, donde fue celebrado un breve y emocionante responso con el que fue despedida y su familia recibió el apoyo emocionado de decenas de personas.
Le sobreviven el esposo José Luis Muñoz y sus hijos Cristian y Jocelyn.
