La voluntaria se retiraba en la noche a su casa aprestándose a subir a su automóvil estacionado en calle Miguel Aguirre, frente a la parroquia San Vicente Ferrer.
En esos momentos se le aproximaron dos sujetos jóvenes que se encontraban apoyados en las rejas de aparroquia y la intimidaron con un arma de fuego.
Enseguida forzaron el maletero el vehículo, para sacar desde el interior implementación bomberil, tanto de rescate forestal como estructural. Eso a pesar que ella intentó convencerlos que ese equipo sólo sirve a bomberos.
Los delincuentes luego huyeron hacia la parte alta en dirección de Las Revueltas.
En la institución hacen un llamado para ayudar a recuperar lo sustraído, haciendo un llamado a no adquirir si este es ofrecido en la calle, o informando si conocen de alguien que lo está haciendo.
