InicioOpiniónOpiniónJuégatela por tiempos mejores.

Juégatela por tiempos mejores.

La elección que se desarrolló éste domingo recién pasado, es demasiado parecida a la del 2009, en donde terminó ganando Sebastián Piñera; por lo que la posibilidad de ganar el día 17 de diciembre, está a su favor.

Quizás lo único que debe preocuparnos a quienes creemos en una sociedad libre, democrática y con oportunidades para todos, es el proyecto político del Frente Amplio que no es otra cosa que un “ofertón político”, que prometen cosas que no serán capaces de cumplir, con el sólo afán de ganar la simpatía de la gente y el voto popular, pero si analizamos bien sus propuestas podremos ver que son de un contenido etéreo, carente de todo realismo en la práctica y lo más grave irresponsable; todo esto solapado por ese simplismo comunicacional que llega fácilmente a las personas y que las sabe embaucar con gran destreza.

Muchos pueden pensar que da lo mismo quien nos gobierne los siguientes 4 años, pero no es así, puesto que necesitamos un Presidente y un Gobierno, que no improvise, que mejore de verdad la calidad de vida de todos, que sea de acción y no que esté para la pura foto y los discursos de buena crianza. Deseo que el próximo Presidente de Chile, respete mi capacidad y libertad de elegir por ejemplo el colegio de mis hijos o nietos, que no sea una tómbola (o mejor dicho el azar porque eso es la tómbola al fin de cuentas) quien decida donde deben estudiar mis familiares, anhelo un Presidente que respete mi libertad, que no por el hecho de pensar diferente se me descalifique y se me cierren las puertas en todo ámbito ya sea laboral, de salud, educación, etc., pero por sobre todas las cosas, quiero un Presidente que respete el derecho a la vida, que la proteja y vele por el fortalecimiento de ésta y de las familias y no por sembrar odio, resentimientos y destrucción.

Pero volviendo al mal llamado “fenómeno” del Frente Amplio, como dije anteriormente, lo único que debe “preocuparnos” o mejor dicho ocuparnos, son sus propuestas, porque por más que quieran hacer ver como que obtuvieron una gran votación, como que tuvieron unos magníficos resultados, para apabullar al electorado y crean que son una fuerza política imparable, la verdad es que no lo son, puesto que los resultados que ellos obtuvieron no fueron más que los que obtuvo Marco Enríquez-Ominami en el 2009, quien fuera en aquella época, el “nuevo fenómeno de la política”, que de fenómeno la verdad es que tuvo bien poco. De hecho es importante destacar que éste “líder” del PRO ha venido bajando sustancialmente en su votación, pasando de un 20% en el 2009 a un 10% el 2013 y a 6% finalmente ésta elección.

Pero bueno, porcentajes más o porcentajes menos, fue Sebastián Piñera quien se ubicó en primer lugar de los ocho postulantes a La Moneda con 37%, seguido de Alejandro Guillier con 22,7%. Sin duda que esta diferencia de casi 15 puntos sobre Guillier es importante y un buen punto de partida y si Guillier quiere captar esos votos, el trabajo se le pone cuesta arriba, porque tomar las propuestas del Frente Amplio para “encantar” a ese votante lo alejaría del centro político, que es donde están los votos más grandes, por lo que si lo hace, estaría poniendo en riesgo su victoria.

En definitiva, ésta es una elección que está abierta, pero al igual que en 2009, Piñera debe llegar a un voto que no estuvo en la primera vuelta aquellos que les dio “flojera” ir a votar y que decidieron ir directamente a votar a la segunda vuelta, a aquellos miles de simpatizantes DC que no estuvieron con Carolina Goic, así como a los otros que habiendo votado por ella, no lo harían por un candidato que reflejará la izquierda más dura que hemos visto en los últimos años y por sobre todo que quiere continuar la tragedia que ha sido éste actual Gobierno, por lo que es hora de pensar en conciencia si queremos un Chile de libertades y progreso o un Chile antidemocrático y de falta de oportunidades.

Susana Verdugo Baraona.

Susana Verdugo
OvalleHoy.cl