InicioOpiniónOpiniónLa renuncia de Valdés, era una “crónica de una muerte anunciada”.

La renuncia de Valdés, era una “crónica de una muerte anunciada”.

Este último tiempo se ha estado hablando de que el Gobierno está pasando por una crisis; pero a decir verdad si entendemos que una crisis es un estado de cosas que no se resuelven, podemos decir que el Gobierno, prácticamente desde el primer día ha estado en crisis y éste es un evento más de los muchos que ya ha tenido; pues con uno de los peores “enemigos” de la Nueva Mayoría, al mando del Palacio de La Moneda como es la Presidenta Bachelet, que no hace más que con cada una de sus intervenciones a destiempo, con sus errores que se repiten una y otra vez, con sus declaraciones de que no leyó la prensa y con su sensación de que no está informada de nada, tirarle “tierra” a todo lo que pretenden legar y frente a esto, nada bueno se puede esperar.

De hecho, cuando pensábamos que La Moneda ya estaba en la cima de la cosecha de los frutos de sus malas decisiones, vemos como ahora debe enfrentarse con la marca de ser la primera administración que cambia de Ministro de Hacienda por tercera vez, antes de cumplir los cuatro años de gobierno.

El ex Ministro Valdés, llegó al Gobierno de Bachelet, generando grandes expectativas, pues constaba con una buena trayectoria y por sobre todo con sentido común (que a veces es el menos común de los sentidos y que tanto le hacía falta a éste Gobierno), para recuperar lo que Alberto Arenas se había encargado de estropear en 14 meses; pero a pesar que aun cuando la gran mayoría reconocía en él un lenguaje, conocimiento y posiciones razonables, tanto la Nueva Mayoría como la propia Presidenta Bachelet, se encargaron de marcarle siempre la pauta, imposibilitándole realizar su trabajo con el criterio y sentido común con el que había sido conocido tiempo atrás; pues, ninguna de sus decisiones económicas podían alejarse del “guion” u “hoja de ruta” (como les gusta hablar en La Moneda) instaurado por ellos.

Si a eso le sumamos, las constantes desautorizaciones en público por parte de sus demás “colegas” de los diferentes Ministerios, era prácticamente imposible que Valdés permaneciera en su cargo, pues la gran mayoría de los Ministros regalones de la Presidenta se fueron dando sus gustitos personales en sus respectivos Ministerios para sacar reformas absurdas adelante, en desmedro de la credibilidad de Hacienda y sobre todo del país y con esto, se nos demuestra como la renuncia del Ministro de Hacienda Rodrigo Valdés no es más que otro de los tantos problemas por falta de liderazgo, de un conocimiento real de las verdaderas necesidades de las personas y de una hoja de ruta incorrecta, caprichosa, improvisada, incompetente y lasciva para el país.

Con éste tercer cambio en dicho Ministerio que es de suma importancia para la estabilidad no sólo económica de un país sino también social, por su capacidad para fomentar la creación de empleos, de mejorar la calidad de vida de las familias, los diferentes accesos a recursos que permitan cubrir las necesidades más inmediatas y mediatas, el crecimiento, etc. Bachelet nos demuestra y confirma una vez más que la estabilidad y predictibilidad en el manejo económico del país nunca fueron sus prioridades.

Y aunque sabemos que su Gobierno tiene nulas opciones de aprobar nuevas reformas, ésta igualmente intentará anunciar reformas (como es habitual) irresponsables, utópicas y carentes de todo sustento, para arrinconar al próximo Presidente de Chile que de seguro será Sebastián Piñera en posiciones impopulares; pues, después de todo como ya lo ha hecho antes ella y se le conoce que para ella lo más importante no son precisamente el crecimiento económico y las estabilidad en el manejo de las finanzas públicas, sino en darse sus gustitos personales con reformas y leyes que prácticamente a nadie le importan y benefician, sino muy por el contrario, les perjudican a la gran mayoría, mayoría de la cual ella dice tener el respaldo pero que en la práctica no es así.

Esperemos que el “lema” de su administración de que “cada día puede ser peor” no se cumpla, pero desgraciadamente, aún le quedan un par de meses de Gobierno; esperemos que tanto el país como su gente pueda sobrevivir un tiempo más a estos eventos.

Susana Verdugo Baraona.

Susana Verdugo
OvalleHoy.cl