Cuando el domingo vimos a Francisco Silva pararse ante la pelota en el punto penal para servir el lanzamiento que podría darle el campeonato a Chile en la Copa América, no pudimos menos de recordar a ese muchacho que conocimos en el 2005 en Deportes Ovalle. Llegado desde Universidad Católica con apenas 19 años y que llamó la atención de la hinchada por su poli funcionamiento y una técnica no menor.
Y cuando el “Gato” (bautizado así por el “Gato Juanito”) convirtió el gol y todo el país estalló en júbilo sentimos que también este triunfo de alguna manera nos pertenecía como ovallinos.
Pero Deportes Ovalle en toda su rica historia ha tenido el ejemplo de otros jugadores que llegaron en busca de una oportunidad, ganando experiencia, y luego catapultados a experiencias mayores en el futbol o en la vida.
Por ejemplo el 2002 pasó por el club un deslumbrante José Luis Villanueva, joven llegado desde las inferiores de Palestino, en un año que no solo tuvo una notable actuación como goleador (20) sino como asistidor de sus compañeros. Después volvió al tricolor, luego Universidad Católica, estuvo también en Racing de Argentina, el Morelia de México, e incluso en el Vasco de Gama del Brasil como compañero del legendario Romario.
Cuando el “Beckham” chileno felicitó al “Gato” por la Copa América 2015 un periodista capitalino le preguntó ¿Porqué son tan cercanos? y Villanueva respondió: “El se fue a préstamo a Ovalle, donde yo también jugué. Conocemos personas en común, que nos trataron muy bien en esa hermosa ciudad, con fanáticos que llevan 8 años esperando que les construyan un estadio”.
Villanueva estuvo recientemente nuestra ciudad vistiendo los colores de Magallanes, oportunidad en la que recordó viejos tiempos de su exitosa participación en Deportes Ovalle y visitó los trabajos inconclusos del estadio municipal.
Villanueva, que en cada uno de sus partidos era acompañado en la tribuna por sus padres, nunca se olvidó de nuestra ciudad.
Otro grande que vistió la verde fue Álvaro Ormeño, hijo de un referente de Colo Colo (Raúl), estuvo en el 2001 en el Limarí y, , aunque posteriormente se desvinculó del club para seguir escalando posiciones, cada vez que Ovalle jugaba en la Región Metropolitana o en Valparaíso, concurría a verlo jugar y entregar el apoyo junto a su familia.
Álvaro se convirtió posteriormente en un referente en Colo Colo, y fue en varias oportunidades convocado a la selección nacional.
También vistió la verde, aunque defendiendo los tres palos, Waldemar Méndez. Llegado desde Ferrocarril Oeste, y luego Unión Calera, arribó el 1995 a Ovalle donde tuvo un año notable, que lo llevó a interesar a Deportes La Serena.
Retirado del futbol, el argentino nacionalizado chileno, en la actualidad es comentarista del Canal del Fútbol, CDF.
Son algunos de los nombres que nos saltan a la memoria viendo al “Gato” delante de la pelota en Estados Unidos. Y la inevitable reflexión de la historia de un club como Deportes Ovalle que ha sabido del paso de gran cantidad de jugadores llegados desde afuera que han tenido la suerte y el orgullo de vestir la camiseta del club que hoy atraviesa una dolorosa crisis institucional.