Esto ocurrió hace casi exactamente un año cuando carabineros de Ovalle que patrullaban por el centro de Ovalle a alrededor de las 03. 40 horas de la madrugada observaron con sorpresa que un automóvil todo terreno circulaba por calle Libertad en contra del sentido del tránsito.
Al pretender detenerlo en la esquina con Victoria, el conductor esquivó a los policías y aceleró en dirección oriente, hasta colisionar violentamente con una camioneta en la esquina de la Alameda. Luego el conductor bajó e intentó huir de infantería, aunque fue detenido por los uniformados.
Se trataba que P.L.R. H, domiciliado en Illapel.
Pero las sorpresas no concluirían ahí: el conductor se encontraba en estado de ebriedad y no tenía licencia de conducir. Mas aún, al revisar la parte posterior del vehículo encontraron un bolso que contenía más de 4 kilos de pasta base de cocaína.
El detenido tres días mas tarde el Juzgado de Garantía de Ovalle fue formalizado por los delitos de tráfico de drogas y conducción en estado de ebriedad con resultado de daños, decretándose entonces su prisión preventiva atendiendo a que su libertad es un peligro para la seguridad de la sociedad.
Desde entonces el imputado ha permanecido recluido en el Centro de Detención Preventiva de Ovalle y luego en el de Illapel , donde en este periodo ha sufrido alrededor de cinco sanciones por su conducta refractaria.
LA VERSIÓN DE LA DEFENSA
Este jueves por tercera vez la defensa del imputado intentó que la medida cautelar de prisión preventiva sea levantada y cambiada por una menos severa.
Esta vez el encargado de deducir el requerimiento fue el defensor privado Carlo Silva que entregó una sorprendente explicación de la conducta de su defendido el día de los hechos.
En primer lugar aseguró que en esa oportunidad P.L.R , que estaba en Ovalle cumpliendo un encargo laboral de su jefe desde Illapel, no habría evitado el control policial por la existencia de la droga (desconocía que esta se encontrare en el vehículo. afirmó ) sino porque ya había sido sancionado en alrededor de siete oportunidades anteriores por conducir sin licencia y en estado de ebriedad.
Asimismo agregó que el paquete con la droga pertenecía a un amigo suyo con quien había estado bebiendo en las horas previas en un local del centro de la ciudad, paquete que supuestamente este último había ido a buscar a un sector de la parte alta de Ovalle sin que supiera su contenido.
Sin embargo al magistrado Manuel Vergara Esparta no le convenció la explicación entregada por la defensa y una vez más negó su libertad, disponiendo su regreso al penal de Illapel.
