InicioOpiniónOpiniónNo perdamos nuestra identidad como Nación libre y soberana

No perdamos nuestra identidad como Nación libre y soberana

Este 18 de 0ctubre se está celebrando a nuestros símbolos patrios (Escudo y Bandera nacional), los cuales son los que nos identifican como Estado, y representan nuestra cultura, ideales y tradición histórica. Símbolos que se encuentran absolutamente vigentes en el inconsciente colectivo y, lo más importante, en el sentir diario de la mayoría de los habitantes de nuestra nación.

Qué  mejor ejemplo de ello son los dos últimos partidos jugados por nuestra selección de fútbol, lo apreciamos en vivo en el partido de nuestra selección con Venezuela, en que vimos a un pueblo feliz de levantar nuestra única bandera y cantar emocionados nuestro himno coreado con un fervor patriótico que nos recordaba, como en tiempos pasados lo hacían nuestros soldados quienes la veneraban y llevaban orgullosos en el campo de batalla.

Los símbolos patrios son muy importantes por múltiples razones, por ejemplo; nos identifican con un sentimiento de unidad nacional generalizado, dan un sentido de pertenencia y con ello, se evita una inestabilidad política, son la representación concreta de la nación y el sentimiento nacional, permite la diferenciación y similitudes entre pueblos de países distintos.

Nuestra actual bandera fue creada en el gobierno de don Bernardo O´Higgins R, la cual a través del Decreto Ley de 18 de octubre de 1817 fue legalizada y, se utilizó en el juramento de la Independencia de 1818. El Escudo nacional actual es posterior, es decir, en el gobierno de Joaquín Prieto debido a múltiples críticas del anterior se decide reformarlo y el actual diseño es obra de Carlos Wood Taylor desde que se aprobó un 24 de junio de 1834. Ambos a través de un Decreto Supremo de 18 de octubre de 1967, fueron declarados como Emblemas Nacionales.

Desgraciadamente desde hace un tiempo se ha venido atacando los cimientos de nuestro país y uno de estos ha sido el ultraje a nuestros símbolos con el fin de que el chileno pierda ese sentido de pertenencia con su comunidad nacional. No olvidar que la bandera es esa unión ideal y abstracta de lo que somos como nación y su realidad concreta. De allí, que la ciudadanía tiene que reaccionar ya que, como se sostiene, “la bandera somos nosotros mismos” (Alejandro Witker, profesor e historiador).

Hacemos un llamado a no creer en que una refundación y quema de todo lo que hemos logrado como nación, llevara a un país mejor y desarrollado, al contrario, es solo ver a países vecinos que han abrazado estas ideas totalitarias y carentes de sentido racional en las condiciones que están al creer en falacias.

Octavio Álvarez C.

OvalleHoy.cl