InicioActualidadCrónicaOvallinos honraron a sus difuntos en el Día de Todos los Santos

Ovallinos honraron a sus difuntos en el Día de Todos los Santos

La mayor afluencia de público se observó en esta fecha en el Cementerio Municipal de Ovalle ubicado en la avenida La Paz, en la parte alta de la ciudad.

Desde temprano se pudo observar una alta afluencia de público, aunque ligeramente inferior a la de años anteriores. Tal vez porque el público ha preferido concurrir en días diferentes de un largo fin de semana, aunque el administrador del recinto, Guillermo Rojas, asegura que aún así la concurrencia ha sido alta. «Al menos superior a la del día anterior”.

Los visitantes al ingresar (trasponiendo una impresionante cantidad de vendedores callejeros apostados en la acera) adquieren flores a la entrada y se dispersan por los pasillos visitando las tumbas de sus seres queridos. Algunos “armados de escobas y rastrillos, ordenan las tumbas o mausoleos, y luego depositan sus ofrendas florales. Finalmente se sientan ante la tumba y con rostros tristes, otros alegres, conversan en voz baja con ellos.

Faltando pocos minutos para el mediodía llegan los bomberos, encabezados por el Orfeón Municipal,  a rendir homenaje a sus difuntos , en tanto casi a la misma hora, se da inicio a la tradicional Misa Católica en el sector del Parque del Recuerdo.

Hace un sol intenso sobre el camposanto, pero eso no es obstáculo para que los asistentes continúan recorriendo el lugar . Entre los asistentes se observa al Alcalde Claudio Rentería y su esposa, y el consejero regional Hanna Jarufe que concurre a la misa del mediodía como es su costumbre cada año.

No obstante el intenso calor hasta las 13.00 horas no ha habido problemas con los asistentes, sólo adultos mayores que han sufrido problemas con las altas temperaturas o con altas de presión, como nos señalan las voluntarias de la Cruz Roja que están atentas a concurrir a cualquier emergencia. En una de esas la ambulancia del Consultorio Jorge Jordan debe llevar a una persona hasta el centro de salud para su atención, aunque nada grave.

Cuando nos marchamos la gente, con flores en la mano y rostros compungidos o con la ilusión de reencontrarse en este momento tan especial con aquellos seres que se han marchado, continúa llegando sin descanso.

M.B.I.

OvalleHoy.cl