¿Se acuerdan cuando nos intoxicaron con el agua?
Toda mi familia y más de 5.000 ovallinos fueron afectados, y salvo una que otra «gestión » tibia por parte de las Autoridades (que al final quedó en nada, o casi nada, que es lo mismo), no hubo más movimientos ciudadanos.
En una reflexión interna trate de entender por qué no fuimos capaces de reaccionar con más energía y reclamar nuestros derechos, no solo a agua limpia y sana , también a salud, seguridad, trabajo, desarrollo etc.
Y la verdad que sigo dándole vueltas a cómo articular el tejido social y ser parte activa y responsable del desarrollo de nuestra ciudad y no solo meros espectadores de las decisiones que toman otros.
Estaba en eso, cuando casi al entrar a un Supermercado de calle Libertad, siento que se aproxima por la calle, una gran columna de gente gritando y lanzando consignas.
Me quedé parado para ver de qué se trataba, y grande fue mi sorpresa cuando empecé a reconocer entre los integrantes de esta Gran Manifestación a muchos de mis más queridos amigos.
No podía creerlo.
Por fin Ovalle estaba despertando. Por fin la gente se está manifestando. Por fin están reclamando sus derechos de este País inmensamente rico. Y ¿Quiénes eran estos manifestantes? Pues en mi opinión, parte importante de la reserva moral de este País… nuestros queridos y vilipendiados Profesores.
En esa oportunidad no pude tomar una foto y solo me conforme con contemplarlos: dignos, altivos, resueltos, conscientes de sus derechos y dispuestos a defenderlos.
¡Qué emoción! Ojala así hubiéramos defendido nuestra vida que estuvo en peligro con la famosa intoxicación del agua; pero los Profesores nos están mostrando el camino.
Ayer, cuando íbamos a hacer ejercicios en la Alameda, volví a encontrarme con los Profesores, y ahora una buena moza docente me ofreció una «churrasca».
– ¿Cuánto vale? – pregunté.
– Nada- respondió – es una atención y una muestra que no nos estamos quedando en la casa, seguimos trabajando y con nuestro movimiento.
Ahora sí que tenía mi maquina fotográfica así que en un «dos por tres» tuvieron la gentileza de mostrar su unión y defensa de sus legitimas demandas.
Profesores de mi ciudad… ¡¡Adelante!!.. y estaba muy rica la «churrasca»
Un abrazo,
Pedro Vargas
