Que en este día que es muy especial para cada una de Uds. reciban un saludo especial que este Dios de amor las bendiga, pues la labor que desarrollan siempre va unida al servicio.
Que siempre está dispuesta a escuchar, a brindar una mano generosa, a levantar el ánimo, a ser confidente, a estar atenta a las personas, a ser puentes con otros, a disfrutar la vida, a ser el sostén en momentos difíciles, a desarrollar lealtades que muchas veces no son muy reconocidas, a sacar de apuro en algún momento conflictivo.
Son las personas leales, que realmente vibran con lo que pasa en la vida de cada persona.
Es la imagen que encontramos en la secretaria ya que en silencio muchas veces esconde sus propios dolores por el bien de realizar su trabajo en forma satisfactoria e eficiente, que hace oídos sordos, la que es capaz de soslayar las diferencias potenciando el encuentro.
Gracias por dar testimonio en cada gesto, en cada palabra.
Gracias por confiar y sentir a las personas como alguien a quien respetar.
Gracias por escuchar, antes de responder a nuestras preguntas.
Gracias por ser compañera en este camino que nos conduce a Dios.
Gracias por la delicadeza que colocas cada día en tu labor.
Gracias por tu eficiencia sin ella muchas cosas no se llevarían a cabo.
Gracias por tu silencio que muchas veces esconde una frustración.
Gracias por tu labor que la realizas con abnegado esfuerzo.
Hugo Ramírez Cordova.
