Se trataría de una persona de facultades mentales perturbadas que, por su conducta violenta, ya tiene otra causa pendiente desde el 27 de julio pasado cuando agredió a un estudiante en la parte alta de la ciudad.
La agresión a la funcionaria del Cesfam Jorge Jordán, en la parte alta de la ciudad, ocurrió en las primeras horas de la mañana de ayer cuando el individuo identificado como F.M.S, de 25 años, llegó para requerir tratamiento en el área dental, y como no fue atendido con la rapidez que quería, se alteró y propinó golpes en el box de atención, quebrando una de las ventanas, lo que provocó que una enfermera resultara con cortes en uno de sus brazos y en el rostro.
El agresor fue detenido por carabineros, pero luego de ser apercibido por el artículo 26 del Código Penal, es decir que requerir todos sus antecedentes personales y dirección, fue dejado en libertad.
F.M.S., explicó el fiscal Freddy Salinas, al parecer padece trastornos mentales, y no se quiso arriesgar una privación de libertad porque se desconoce cuál sería su reacción encerrado en un calabozo. Es así que en las próximas horas se solicitará un examen siquiátrico para conocer su situación mental y será formalizado, de manera escrita (es decir sin una audiencia formal) por el delito de daños. En tanto ello ocurre fue puesto a disposición de su familia.
El imputado tiene otra causa penal pendiente cuando el 27 de julio pasado, alrededor de las 8:20 de la mañana en el Colegio El Ingenio ubicado en el sector Los Halcones de Ovalle, agredió a un estudiante del establecimiento educacional.
Personal del recinto educacional procedieron a separar a ambas personas, principalmente, velando por la seguridad del menor, que estaba reducido y siendo golpeado por el agresor. Posteriormente el menor pudo resguardarse al interior del colegio.
No obstante eso el agresor regresó y comenzó a dar golpes de pies y puños a la mampara de entrada y a pesar de los intentos por calmarlo, se dirigió a un sector donde los docentes estacionan sus vehículos particulares y procedió a golpear dos automóviles, los cuales resultaron con daños en sus parabrisas.
Al ser formalizado posteriormente en el Juzgado de Garantía, el imputado mostró una permanente actitud agresiva tanto durante su permanencia en el calabozo como durante la audiencia.
