Según la última encuesta CADEM el 80% de los trabajadores cree que le van rebajar sus remuneraciones o va a perder su trabajo en los próximos cuatro meses.
A casi dos meses del inicio del confinamiento y toque de queda impuesto por el gobierno, muchas son las personas que día a día van a su lugar de trabajo corriendo riesgo de ser contagiadas, sumandose a los 134 casos activos que existen en Ovalle en la actualidad. En una comuna donde la población es de 89 333 habitantes el número de contagiados ha subido de manera progresiva y ¿Por qué se produce esto? La respuesta es simple, y nos la entrega una persona que como muchas día a día sale a trabajar por su familia con una angustia e inseguridad enorme debido al miedo de llevar el virus a su morada.
Criss Muñoz es madre de dos pequeños y toma el transporte público de manera regular para llegar a su lugar de trabajo ubicado en pleno centro de la ciudad, en una tienda de ropa interior. Allí dos compañeras más la acompañan en un turno que inicia a las 10:00 de la mañana y finaliza a las 18:00, la gente es mucha ya que con el mall cerrado, el centro es el principal paseo comercial en funcionamiento de la ciudad.
“La gente es mucha, nos señala Criss: nos ha ido muy bien en ventas somos una de las 5 tiendas que siguen abiertas a nivel nacional, las clientas todas vienen con sus respectivas mascarillas. Pero no cumplen con el distanciamiento y no se echan jabón gel, quieren que uno les eche y si una hace eso se rompe la distancia. Por lo cual siempre invitamos a las clientas a que ellas mismas lo hagan para así no exponernos, contamos con 2 dispensadores de alcohol gel.”
La tienda vivió un periodo de reactivación donde se implementaron las medidas de higiene necesarias luego de una cuarentena que tuvo una duración de 20 días hábiles para sus trabajadoras, con la suspensión de su contrato por parte de la famosa cadena de lencería, la cual imitó las acciones de casi el 31% de las empresas. Ya que según el último informe de la Superintendencia de Pensiones son más de 600.000 las personas a lo largo del país que se encuentran en cuarentena con el contrato suspendido.
Por otro lado, como parte de “esta reactivación laboral” Criss nos explica que se les entregó a las vendedoras un protocolo sanitario de prevención personal y uno específico para la tienda hecho por un previsionista de riesgo, en este se hace mención del constante lavado de manos, respetar el metro de distancia entre clientes y también entre las trabajadoras. Respecto a lo último nos dice: “Nos sentimos inseguras, porque no respetamos la distancia entre nosotras”.
Según la encuesta realizada por CADEM en conjunto con la MUTUAL de seguridad afirma que el 73% de los trabajadores tiene miedo a contagiarse de camino a su trabajo o en el lugar donde trabaja. Y es que el miedo es el principal sentimiento de los trabajadores que a diferencia de muchos no pueden quedarse en casa.
Por: Paulina Cereceda
