Un lector nos hace llegar el video de una carrera de automóviles en plena rut D- 43 . Las imágenes muestran como el automóvil del denunciante es sobrepasado por la iquierda por un automóvil blanco a alta velocidad y, casi de manera simultánea otro automóvil lo rebasa por el costado derecho, que corresponde a la berma.
Ambos automóvil se alejan eludiendo a otros vehículos que los anteceden, haciendo arriesgadas maniobras.
Las imágenes muestran como algunos kilómetros más adelante, un grupo de automovilistas está reunido al costado de la ruta.
Lo que se ha visto es un ejemplo de una “carrera clandestina” que se realizan todas las semanas en distintas carreteras de la región, en las que un grupo de automovilistas, aficionados a la alta velocidad, se reúne para concertar piques de velocidad o derechamente carreras, sin importarles poner en riesgo a otros conductores que ocupan la misma ruta.
Publicada la denuncia, esta es leída en pocas horas por más de 15 mil personas, en tanto los comentarios de los lectores en su mayoría son de repudio a esta actividad. Aunque hay quienes los justifican opinando que se hace necesario que estas personas cuenten con un circuito adecuado para hacer estas prácticas, un lugar privado y seguro sin que pongan en peligro a terceras personas.
Lo cierto es que los autos “enchulados” o arreglados son un peligro no solo para ellos mismos, sino para terceras personas, conductores o peatones inocentes que puedan encontrarse con ellos durante estas carreras.
Pero además a diario son una molestia por el ruido que provocan sus motores y silenciadores adaptados cuando circulan por las ciudades a toda hora, en especial durante la noche, sin respetar el derecho al descanso de los vecinos en las madrugadas. Y sin respetar toque de queda o el sentido del tránsito.
Ante esto, reiteramos lo que señalamos hace unos meses en estas mismas páginas: carabineros y las autoridades se hacen los sordos.
M.B.I.
