NOTICIA EN DESARROLLO. El accidente ocurrió faltando minutos para las 9.00 horas en la ruta D 55 que comunica Ovalle con la localidad de Sotaquí.

En las proximidades de un conocido local de entretenimiento el automóvil Hyundai Accent de color blanco patente UP – 2365 que circulaba de Oriente a Poniente tripulado por una familia (incluida una lactante), fue impactado de frente por un segundo vehículo. Se trataba del furgón Hyundai de color amarillo y franjas terracota patente PE 6479 que viajaba en dirección a Sotaquí.

Como consecuencia del impacto de alta energía resultaron siete personas lesionadas de distinta gravedad las que fueron atendidas por voluntarios de la Unidad de Rescate vehicular del Cuerpo de Bomberos de Ovalle, y personal del SAMU de Ovalle para su traslado hasta el Hospital de Ovalle.

Aunque no existe aún una versión oficial de la causa de accidente, este se habría producido cuando el furgón presuntamente habría traspasado la pista contraria de la ruta.
No se entregó la identidad de los lesionados, así como aún no existe informe de las características de sus lesiones.

El miércoles 18 alrededor de las 15.00 horas la encargada del local Yin Yin, ubicada en calle Ariztía Oriente, casi al llegar a Benavente con asombro observó como un sujeto ingresaba a su negocio y salía huyendo con tres unidades de ropa interior.

El jueves en la tarde la víctima, mientras caminaba por la calle  Ariztía Poniente, casi al llegar al terminal de taxis colectivos a La Serena, con no menor sorpresa descubrió que en un puesto de venta en la acera una mujer tenía a la venta 15 de los calzones de los que le habían robado el día anterior. Los identificó porque al revisarlos, estos aún tenían los números de serie de su mercadería.

En los minutos siguientes hizo la denuncia y carabineros detuvo a la comerciante, identificada como M.M. M. V. domiciliada en Puntilla de Barrancas, por el delito de receptación; esto es tener en su poder objetos productos de un robo.

Ella fue requerida ayer en el Juzgado de garantía de Ovalle , y arriesga una pena de 540 días de presidio y al pago de una multa de 5 UTM. El defensor público pidió una nueva fecha para el juicio a realizarse el 10 de junio próximo a las 9.00 horas, oportunidad en la que se explorará una salida alternativa. Más aún cuando la imputada carece de antecedentes penales.

Carabineros efectuó el control de identidad en la vía pública luego de recibir llamados de vecinos denunciando que la mujer merodeaba por el sector, supuestamente con la intención de robar. El juez de Garantía acogió el reclamo de la defensa y declaró ilegal el procedimiento.

Esto ocurrió en la tarde del jueves en la intersección de las calles Las Orquídeas y Los Jazmines de la población 8 de Julio hasta donde llegó una patrulla de carabineros atendiendo llamados de vecinos del sector denunciando que una mujer sospechosa rondaba por las casas, supuestamente con la intención de robar.

Los uniformados ubicaron a la sospechosa identificada como Nicol Marian Araya Claro, 25 años domiciliada en la Villa Tuquí, y le hicieron un control de identidad. Como esta tenía una restricción para salir a la calle pues cumplía una sentencia de arresto domiciliario total, fue detenida  y en la mañana del viernes puesta a disposición del Juzgado de garantía acusada de quebrantamiento de restricción.

Sin embargo el abogado defensor protestó ante el tribunal alegando que carabineros no tiene atribuciones para solicitar la identidad a una persona en la calle si no hay indicios claros que esta ha cometido un delito. Al menos no mientras no se apruebe la controvertida ley del control de identidad.

El Juez Luis Muñoz, le encontró razón y declaró ilegal la detención, aunque accedió a programar para el 23 de mayo una audiencia para revisar la medida cautelar de la imputada.

CONDENADA

Pero además Nicol Araya mantenía una orden de detención pendiente del mismo tribunal porque no se había presentado a cumplir una condena de 61 días de reclusión en el Centro de Detención de Ovalle.

Por lo que se dispuso el inmediato cumplimiento de esta.

Parece que despues de todo tenían la razón los vecinos que la denunciaron.