Este martes en la Cámara de Diputados votaremos el primer proyecto de ley que forma parte de la Gran Reforma Educacional que comprometió el gobierno de la Presidenta Bachelet y que considera por lo menos 7 proyectos de ley, desde pre escolar, básica, media, subvencionada o pública, hasta la educación superior.
Este proyecto de ley de la Inclusión, a pesar de las críticas, persigue que sean efectivamente las familias las que elijan el colegio de sus hijos y no como ocurre ahora, en que el copago que se exige es una limitante para familias de menores recursos en establecimientos que, además, seleccionan a sus estudiantes por notas y por una prueba que no refleja necesariamente las potencialidades de niños y jóvenes y que, así también, seleccionan apoderados.
Es cierto que padres y apoderados tienen dudas, porque no se les ha entregado toda la información respecto a este proyecto de inclusión que votaremos el martes. Este aumenta el monto de subvención a TODOS los establecimientos que reciben recursos públicos, tanto municipales como particulares subvencionados. Esto significa que los Particulares Subvencionados aumentarán sus ingresos y también los municipales aumentarán sus ingresos, recibiendo además en ambos casos subvención de gratuidad del 10% y por primera vez subvención escolar preferencial para niños de clase media, pertenecientes al tercer y cuarto quintil.
Este primer proyecto de ley, que no es toda la reforma educacional, implica que progresivamente aumentarán los aportes de subvención a todos los establecimientos educacionales, para que también, progresivamente, baje el copago obligatorio que hoy pagan los padres hasta reemplazar todo ese copago obligatorio por subvención estatal, peso por peso. Y en aquellos casos en que los padres y apoderados quieran mantener un copago, se permitirá que realicen aportes VOLUNTARIOS y no obligatorios para mejorar la educación de sus hijos.
Respecto a la Libertad de Elección, este proyecto de ley que votaremos el martes considera que los padres y apoderados puedan elegir libremente el colegio que quieren para sus hijos, sin que el ingreso familiar sea una traba ya que el copago lo asumirá el Estado. El proceso de postulación y admisión se realizará en el mismo establecimiento, los padres deberán adherir al proyecto educativo del colegio y a su reglamento de disciplina y no se podrá discriminar a los niños por el ingreso de los padres, ni por si ellos están casados o separados. Y si hay mayor demanda que cupos disponibles, tendrán preferencia para acceder a él los niños que tienen hermanos en el colegio.
De aprobarse este proyecto de ley, todos los sostenedores podrán continuar con su proyecto educativo. Los que no son dueños de la infraestructura podrán comprarlos a tasas preferenciales con garantía estatal y si prefieren podrán arrendarlos. Se reconoce a todos los sostenedores que laboren en un establecimiento su derecho a percibir una justa retribución o justa remuneración en condiciones de mercado. Lo que no se permite es que sostenedores que no trabajan para el colegio retiren dividendos que provienen de recursos públicos destinados a la educación.
En resumen, el proyecto que votaremos este martes aumenta los recursos destinados a todos los colegios vía subvención, el Estado se hace cargo del copago obligatorio que hace hoy la familia, pudiendo haber aportes voluntarios; y a cambio le pide a los sostenedores que no seleccionen estudiantes y no repartan utilidades.
Matías Walker Prieto
Diputado